El Murcia engorda su ego en el derbi

Los dos técnicos, tanto Simón como Motos, sorprendieron con su once inicial. El técnico grana decidió no tirar de inicio de Pablo Ganet, aunque mantuvo su apuesta por un Manu Pedreño que se ganó la titularidad a pulso y por un Pablo Haro que fue decisivo. El técnico del Mar Menor dejó fuera a Ubis, su máximo goleador, y situó en la punta del ataque a Ballesta, un delantero recién llegado al equipo costero en el mercado invernal.

Pero, en la primera parte, el Real Murcia fue superior al Mar Menor. El equipo de Mario Simón hizo más para adelantarse en el marcador. Aunque la primera aproximación peligrosa fue del equipo de Javi Motos, propiciada por un disparo lejano de Fran Moreno, los granas parecían mejor asentados en el terreno de juego. No obstante, fue Ballesta el que remató de cabeza por encima del larguero. Pero pese al susto, fue el equipo local el que tomó el mando del derbi.

El conjunto grana se adueñó del balón y el Mar Menor dio un paso atrás, Decidió esperar a que su rival se equivocara. Dani García se probó desde lejos por los locales, pero su disparo se fue desviado. Después, un balón cazado por Julio Gracia dentro del área acabó con un balón muerto que Cifu alejó de la meta de Ackerman. El equipo de Mario Simón insistía cada vez más y se acercaba al gol paso a paso.

Santi Jara lo intentó también desde lejos antes de que también lo hiciera Andrés Carrasco. Javi Motos se vio obligado a retirar a Morros, lesionado, por Abel López. Hasta que en otro acercamiento del Murcia Pablo Haro aprovechó un balón muerto tras un remate de Athuman para hacer el primer gol. El extremo sigue correspondiendo con buenos partidos a la confianza que su entrenador le ha mostrado. La primera parte acabó sin sobresaltos para el equipo local, mientras que el Mar Menor necesitaba cambiar la cara en la segunda mitad.

Tras el descanso el choque los primeros minutos del segundo acto fueron parecidos a los de la primera mitad, con los dos equipos probándose, desde lejos, sin demasiada convicción. Primero fue Fran Moreno por el Mar Menor, una jugada que fue contestada por Santi Jara y Dani García, que no tuvo claridad a la hora de rematar a puerta en una posición forzada en el segundo palo. Pero Motos necesitaba más para empatar. el Real Murcia no sufría, y sacó al terreno de juego a Ubis y Titi, dos delanteros. Necesitaba remover un partido en el que los locales no estaban sufriendo.

Pero el Mar Menor no mostró más capacidad ofensiva con los movimientos. Es más, tras un remate de Athuman que se fue arriba llegó el segundo gol grana tras un balón peleado por Carrasco que remató a la red Santi Jara. El Murcia se mostraba como un equipo solvente que apenas dejaba opciones a su rival, no cometía errores. Zeidane, que saltó al campo junto a Boris, debutó con la camiseta grana y dejó muestras de su calidad. Fueron unos minutos antes del estreno de Drenthe, que saltó al césped con el partido resuelto y apenas se dejó ver. El propio Boris pudo hacer el 3-0 para dar carpetazo a la fiesta grana, pero su lanzamiento se estrelló en el palo.

Pero el derbi, que estaba ya resuelto, dejó a simple vista que el Real Murcia va en serio, que no quiere fallar en el momento más importante de la temporada y que le ha ganado una batalla muy importante a un rival directo por el 'playoff'. Es un equipo con empaque, bien construído y trabajado por Mario Simón y que está más cerca de la cabeza de la tabla que del sexto puesto.

Además del esperado estreno de Drenthe, que todavía va a tardar unas semanas en ser determinante y que debe adaptarse al alto ritmo de competición de esta Segunda RFEF, la mejor noticia es la sobriedad de Manu Pedreño, un central sub 23 que llegó al club grana para ocupar un discreto papel y que no quiere soltar la titularidad por nada del mundo. En los últimos minutos, y con el choque ya resuelto, se fue al suelo para evitar el 2-1 del Mar Menor. Quizás fue la mejor imagen de lo que es el Real Murcia ahora mismo: un grupo de futbolistas comrometidos que no quieren desaprovechar la oportunidad de hacer algo grande con un Real Murcia necesitado de alegrías y que no quiere dejar pasar la oportunidad de hacer que la grada del Enrique Roca vuelva a sonreír, aunque el club grana no ocupe aún el lugar que le corresponde por su historia.

El Real Murcia, tras la jornada de ayer, se ha agarrado con más fuerza a la zona alta de la clasificación. La Nucía, tras doblegar al Pulpileño, vuelve a ocupar el primer puesto del grupo aprovechándose del pinchazo del Intercity en Melilla y saca apenas dos puntos a los de Mario Simón. La victoria del Hércules ante el Alzira deja, sin embargo, un sabor agridulce a los grana ya que el cuadro del Rico Pérez aventaja en un punto a los murcianos y deja descolgado al próximo rival del Murcia, que ya estásiete puntos por debajo de los granas.

La derrota del Eldense en el Pepico Amat ante el Socuéllamos también favorece al equipo que dirige Mario Simón dado que ya adelanta en cinco puntos al cuadro blaugrana, su inmediato perseguidor en la clasificación. Por lo tanto, la cabeza de la tabla se ha apretado aún más con cuatro equipos en apenas dos puntos a la vez que el Real Murcia ha conseguido abrir una brecha de cinco, siete y ocho puntos respecto a sus perseguidores.