Moreno consigue el apoyo de la junta de accionistas: «Nos vamos a sacrificar todos por el Murcia, yo el que más»

Los accionistas respondieron una vez más a la llamada del club y acudieron en buen número a una junta clave para el futuro de la entidad. De hecho, en la cita estuvo presente el 78,85% del capital social cifrado en 11,3 millones. Encima de la mesa solo había un punto que aprobar: seguir hacia adelante con el plan de reestructuración de la deuda de la entidad elaborado por los asesores granas, una medida que aligerará en más de 10 millones el agujero de la entidad y que socialmente tiene algunos enemigos.

Para la ocasión no faltaron los abogados de algunos accionistas, como Alberto Martínez Escribano y Reinaldo Carrillo, en representación de Enrique Roca, que además posee contratos con la entidad que también se verán afectados, o José Basilio Gómez, letrado de Agustín Ramos. El Consejo, para la ocasión, citó a Agustín Navarro Núñez con el fin de que levantara acta de la junta, mientras que también estuvieron presentes el abogado Higinio Pérez,impulsor del plan, el economista Ramón Santos y Rafael Marras, reestructurador nombrado el Juzgado Mercantil.

Germán Maldonado, secretario del Consejo, comenzó explicando en qué iba a consistir esta histórica cita, mientras que el siguiente en tomar la palabra fue Felipe Moreno, máximo accionista grana, que aseguró que esta era «la junta más importante de los últimos veinte años; si no hacemos un plan como este, con sacrificos, el Real Murcia no es viable. La deuda es leonina, los intereses nos comen y por mucho dinero que pongamos es imposible. Nos vamos a sacrificar todos, el que más yo. Habrá un antes y un después de esta junta», aseguró el cordobés, que contó con el apoyo de la mayoría de accionistas presentes, que entienden que es un sacrificio necesario para sguir salvando el club.

Higinio Pérez, también accionista, se encargó de explicar el plan de reestructuración y los motivos que han llevado al Consejo a tomar esta medida, igual que Rafael Marras, el reestructurador, que aseguró que «el club está en situación de insolvencia inminente, con dificultades para acometer los pagos inminentes; de momento se están solventando con financiación interina (Felipe Moreno). La reestructuración es una gran solución.Los acreedores tienen que hacer un gran sacrificio, y por lo tanto también los accionistas», aseguró. La oposición a la reestructuración la personalizó Julián Luna, al que Felipe Moreno invitó a desembolsar el dinero que él mismo había puesto en el club para ocupar su lugar, mientras que los letrados de Enrique Roca y el de Agustín Ramos mostraron sus reticencias al plan que llevará a cabo el Real Murcia. Por contra, otros accionistas granas como la Federación de Peñas granas representadas por Salvador Oliva, mostró el apoyo de casi la unanimidad de sus asociados.

Finalmente, tras más de dos horas y media de exposición e intervenciones de los accionistas o sus representantes, se procedió a votar un plan de reestructuración que salió adelante con el 79,85% de los votos a favor y 20,15% en contra. Por lo tanto, además del 59% de Moreno, otro 20% de accionistas dijeron 'sí' a la solución propuesta.

A partir de ahora, y una vez que esté lista, preparada por los asesores legales del club, toda la documentación necesaria, será el Juzgado de lo Mercantil 1 de Murcia, que escuchará primero las posibles alegaciones de los accionistas y acreedores disconformes, el que decidirá si sale adelante o no una propuesta que puede cambiar la vida del Murcia para siempre y dejar a la entidad con apenas 15 millones de euros pendientes con las administraciones que el propio Felipe Moreno está dispuesto a encarar en 2024.

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