El interés de las fotovoltaicas por Torremendo no decae pese a los rechazos del Consell

Esta semana el Ayuntamiento celebraba que el Consell tumbara un proyecto de planta fotovoltaica que amenazaba la expansión del núcleo urbano de Torremendo, pero el interés empresarial, lejos de decaer, persevera. La Generalitat sacaba ayer a exposición pública otro proyecto de planta solar en el entorno de la pedanía oriolana.

Esta última planta se ubica a las afueras de esta población, bastante más alejada de zonas habitadas y también sobre terrenos de secano. El promotor es la empresa valenciana Villenlar. Bajo el nombra 'PSF Orihuela Belmonte', la instalación tendría una potencia instalada total de 9.967 kilovatios pico. Además, contaría con dos centros de transformación y una extensa línea de evacuación hasta San Miguel de Salinas.

Hasta ahora, el principal problema para ubicar plantas solares en Torremendo ha venido por el recorrido que hacen las líneas de evacuación. Las plantas solares que se ubiquen en este punto tienen como lugar de descarga más cercano el transformador de La Marquesa y, para llegar hasta allí, se hace ineludible tender los cables por medio de espacios encuadrados dentro de la red Natura 2000, entre el embalse de La Pedrera y el paisaje protegido de la Sierra de Escalona (en este caso, además, pendiente de su declaración como parque natural).

En este punto, indica el proyecto publicado ahora por la Generalitat, la línea de evacuación, plantea tres alternativas con trazados muy similares y longitudes que varían entre los 14 y los 16 kilómetros. La primera, sin ir más lejos, plantea compartir la línea de evacuación de la planta fotovoltaica impulsada por Amber Solar, 'Torremendo I'; esta es, la que esta misma semana recibía el rechazo de la administración autonómica, tras las alegaciones presentadas tanto por el Ayuntamiento de Orihuela como por grupos ecologistas.

El Consistorio pedía el rechazo, en concreto, «por afectar gravemente a las posibilidades de ampliación del suelo urbano de esta pedanía, el proyecto no tenía en cuenta que entre las parcelas afectadas se encontraban tres PERI semiconsolidados, junto al grave daño paisajístico».

Según recogió el Diario Oficial de la Generalitat, el servicio autonómico de Energía estimaba la línea de evacuación «no compatible», alegando que varios apoyos de la línea se encuentran afectados por riesgo de inundación de carácter geomorfológico, y se indicaba que en las parcelas ocupadas por la instalación había pendientes superiores al 25%.

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