Desmontan los últimos chiringuitos de Orihuela a la espera de que se publique la licitación
El Ayuntamiento llega a un acuerdo con el anterior concesionario para que lleve las casetas al depósito municipal
Los vecinos de la costa se llevaron este martes una imagen descorazonadora. El regreso de los chiringuitos a las playas es todo un clamor, pero ayer el Ayuntamiento, tras conseguir revertir la propiedad de las casetas, desmontaba las últimas que quedaban instaladas, las de la Caleta de Cabo Roig y la de la playa de La Zenia (Cala Bosque). Según informan fuentes municipales a LA VERDAD, el Ayuntamiento alcanzó un acuerdo con el anterior concesionario del servicio, Chiringuitos del Sol, para hacer a medias el desmontaje y traslado de estos bares de playa; si cabe, los más concurridos y rentables del litoral oriolano.
El Ayuntamiento ha puesto la grúa y Chiringuitos del Sol habría puesto la mano de obra, pues ninguna otra mercantil tenía la experiencia para hacer este trabajo, señalan. El destino final de estas casetas, que funcionaban todo el año, y, esperan, el del resto que solo funcionan en temporada baja es el depósito municipal de la calle Ariel.
Paralelamente, la Concejalía de la Costa, en manos del líder de Vox, Manuel Mestre, trabaja para deshacer el desaguisado heredado del anterior mandato, cuando el gobierno PSOE-Cs decidió el año pasado no prorrogar más el contrato. Según ha podido saber este diario, la intención de la Concejalía de cara al nuevo servicio es que salga dividido en cinco lotes (uno de deportes náuticos) y no en bloque como hasta ahora. La distribución de estos finalmente será geográfica, de modo que los que resulten adjudicatarios no tengan que hacer grandes desplazamientos. Asimismo se va a incluir una cláusula por la que los licitadores solo podrán optar a hacerse con dos lotes como máximo. Para compensar las diferencias de ingresos en chiringuitos de unas playas y de otras, el Ayuntamiento adaptará el canon, siendo más alto en aquellos bares de playa cuya facturación anual se calcule más elevada. Su salida a concurso «está muy cerca».
La Caleta y Cala Bosque se espera que sean los bares más disputados. El movimiento de desmontaje ayer, en otro orden de cosas, no deja de ser curioso, pues hasta ahora las relaciones del Consistorio con la anterior empresa concesionaria habían sido tensas. Chiringuitos del Sol recurrió la decisión del anterior ejecutivo local por entenderla injusta. La empresa defendía que, durante el curso del contrato, se habían dado situaciones excepcionales que habían mermado en gran manera la rentabilidad de los chiringuitos oriolanos. Tal es el caso de la 'borrasca Gloria', que produjo enormes daños en todas la Costa Blanca, y, posteriormente, la pandemia y todas las restricciones que trajo, en especial, al mundo de la hostelería. Cuestiones que, a juicio de la mercantil, hacían procedente una indemnización.
