No podía la consejera de Educación haber elegido peor día para no ofrecer certidumbres sobre la vuelta a clases en condiciones de seguridad. Y es ... que las cifras de contagios mostraron ayer que estamos ante una nueva ola, con una incidencia similar a la de febrero. Acierta la consejera en apostar por la presencialidad en las aulas, pero tienen razón las organizaciones de padres y docentes cuando dudan de que pueda asegurarse el cumplimiento de los protocolos sanitarios en los centros si no se mantienen los 1.500 profesores de refuerzo contratados por la Covid. Campuzano dejó abierta la posibilidad de reforzar la plantilla, pero no dijo cómo. Si hubiera dado la rueda de prensa hace una semana, quizás no habría generado preocupación en la comunidad educativa, pero lamentablemente la evolución de la pandemia está tomando un giro a peor cada día que pasa. A tiempo está de rectificar.
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