Un día internet se vendrá abajo y el mundo entrará en pánico, leí una vez de alguien y la frase se me quedó grabada. Me ... acordé de ella el lunes con el eclipse de Google, que vino a durar como una hora, poco tiempo pero suficiente para que las redes sociales sufrieran un terremoto y empezaran a borboritar de mensajes quejándose por el esguince en la Red. Y eso que fue una hora, ¿se imaginan un día entero? Sí, el mundo entraría en pánico. Igual es que a Google le atacó el virus. Menos mal que en España ya tenemos fecha, el 4 de enero, e incluso antes, para que la vacuna vea la luz, lo que es una cosa buena. Decía Tom Wolfe cuando hablaba de algo muy bueno que era como comerse el pastel y seguir teniéndolo. Sí, la vacuna es algo muy bueno, por cuanto en temas de responsabilidad los españoles andamos con una mano delante y otra detrás y se me antoja que la vacuna es el último recurso para amortiguar una tercera ola más que previsible tras el mejunje de reuniones de Navidad.
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