Secciones
Servicios
Destacamos
A. ALONSO
Lunes, 24 de septiembre 2018, 08:59
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
Una carretera comarcal por donde antes circulaban apenas 300 vehículos al día ahora soporta más de 1.500, y buena parte son camiones. Desde que se abrió al tráfico el tramo de la autovía entre Yecla y Jumilla, hace casi once meses, la carretera comarcal RM-424 se ha convertido en la conexión de la vieja nacional 344 y la nueva y flamante A-33. Un vial que no fue concebido para la cantidad y ni en el tipo de tráfico que soporta durante unos tres kilómetros de longitud. Además, es la vía de salida directa de los vecinos de Yecla para acceder a la autovía y desplazarse hacia la capital.
El resultado del aumento del tránsito de vehículos es el que se esperaba: la carretera está destrozada. Los baches aparecen cada día, el firme está abombado y la seguridad para los conductores ha disminuido considerablemente. La competencia de esta carretera es de la Comunidad Autónoma, que ya ha colocado varios carteles de grandes dimensiones, con un color amarillo muy visible, en los que los conductores pueden leer el mensaje: «Firme en mal estado».
La Consejería de Fomento ya ha calculado lo que supondría arreglar los algo más de tres kilómetros de vía: 400.000 euros. Sin embargo, el Gobierno regional considera que la reparación de los daños debe correr a cuenta de la Demarcación de Carreteras del Estado, ya que los vehículos seguirán circulando por la carretera comarcal mientras no esté finalizada la construcción de la autovía. Asimismo, fuentes de Fomento explican que los daños registrados en la carretera comarcal han sido causados «porque el Ministerio no ha construido aún el último tramo de la autovía A-33 entre Yecla y Caudete».
Mientras las administraciones públicas se tiran pelotas a los tejados sobre quién debe pagar la obra, los conductores siguen sufriendo el mal estado de la vía, que continúa deteriorándose a marchas forzadas ante el aumento imparable de tráfico pesado que utiliza los tramos ya abiertos de la A-33 como alternativa a la autovía del Mediterráneo. De hecho, el tráfico registrado en esta carretera regional se ha quintuplicado en solo un año, pasando de 324 vehículos diarios en 2017 a más de 1.500 en 2018, según los datos aportados por la propia Comunidad Autónoma.
El Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Yecla ha solicitado al alcalde, Marcos Ortuño, que se dirija a la Comunidad Autónoma para «exigir» que se repare el firme de la carretera. Los socialistas lamentan que la medida que se ha tomado por parte de las autoridades es colgar un cartel «informando de lo obvio», explican. Además, independientemente de las administraciones, lo importante es que «está en juego la seguridad vial de muchos conductores».
Ciudadanos ha ido más lejos. La formación anuncia su intención de presentar un plan de mejora de los accesos a Yecla por los dos puntos que conectarán el núcleo urbano con la A-33. El portavoz de la formación naranja en la Asamblea Regional, Miguel Sánchez, anunció que el plan pretende «desdoblar los dos accesos a la autovía, y para ello incluirá una partida económica concreta en el presupuesto regional del próximo año».
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La hora que separó a una madre y su hijo de morir juntos en Palencia
El Norte de Castilla
Horarios e itinerarios de la Semana Santa de Cádiz 2024
La Voz de Cádiz
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.