María Rosa, imputada por el 'caso Visser', cambia de abogado defensor

María Rosa Vázquez, una de las imputadas por el asesinato de la jugadora holandesa de voleibol Ingrid Visser y su pareja, Severein Lodewijk, ha decidido cambiar de abogado y dejar su defensa en manos del letrado Raúl Pardo-Geijo Ruiz. Según ha podido saber este diario, Vázquez ha decidido prescindir de los servicios de su hasta ahora abogada, Mari Paz Giráldez, para confiar su defensa a este letrado, que ya se ha hecho cargo de otras importantes defensas (está personado en los casos de corrupción 'Umbra', 'Valhalla' y 'Biblioteca', entre otros).

Amiga de Juan Cuenca desde hace años, María Rosa Vázquez fue la persona que alquiló la 'Casa Colorá' en su nombre y que llevó a los dos holandeses hasta ese lugar, donde perderían la vida de una manera brutal. La procesada ha admitido que Cuenca le pidió «una radial, sosa cáustica, bolsas de basura...» y más tarde una motosierra, pese a lo cual sostiene que no pensó que hubiera un plan para matar a la pareja. Ha declarado, asimismo, que se siente engañada por Cuenca. Días después de la desaparición de los holandeses acudió a la Policía para contar que sospechaba que habían sido asesinados.

La juez instructora del caso decidió el pasado octubre mantener la imputación que pesa sobre Vázquez. Pese a que la fiscal reclamó el archivo de los cargos y aunque esta vecina de Molina de Segura siempre ha mantenido su inocencia y ha manifestado sentirse engañada y traicionada por Juan Cuenca, la juez aseguró que «no se han desvirtuado los indicios racionales de criminalidad ya recogidos en el auto de 25 de junio». Razón por la cual la mantiene encausada y avanza que tendrá que sentarse en el banquillo por el doble crimen. Más todavía, la acusa directamente de dos delitos de asesinato, en la misma condición que Juan Cuenca y los presuntos sicarios rumanos Valentín Ion y Constantín Stan.

Los abogados que representan los intereses de los familiares de Ingrid y Lodewijk, y que ejercitan la acusación particular, sostienen que «era perfectamente conocedora del criminal plan urdido por el señor Cuenca».