«Un profesor no enseña, entusiasma»

El investigador matemático brasileño Manfredo Perdigão do Carmo es investido esta tarde doctor Honoris Causa por la Universidad de Murcia (UMU). Considerado como la mayor autoridad mundial en Geometría Diferencial, Do Carmo defiende la esencia de la universidad, hoy más que nunca, como lugar de investigación, de debate, de discusión... «Si aplicamos las premisas que funcionan en la industria a la Universidad, fallamos», advierte.

-¿Podría explicar en pocas palabras qué es la Geometría Diferencial?

-Es el estudio de la Geometría que utiliza el cálculo diferencial como principio.

-Usted es la mayor autoridad mundial en la materia; sin embargo, inició su carrera profesional como ingeniero...

-Aprendí muchas matemáticas, pero luego me di cuenta de que el ejercicio de la profesión era aburrido y volví a la universidad. Pronto decidí que iba a dedicar mi vida a las matemáticas.

-Mantiene que un resultado matemático correcto no puede contrariar a la naturaleza. ¿Por qué?

-Las matemáticas tienen que tener siempre su aplicación en la naturaleza. La única condición que deben cumplir las matemáticas es la consistencia.

-A sus alumnos no suele darles los problemas a resolver...

-No les planteo problemas, les doy toda la responsabilidad para que ellos se planteen todas las preguntas. Así crecen más rápido como investigadores.

-¿Por qué se 'atrancan' tanto los alumnos de Primaria con las matemáticas? ¿No se enseñan bien o no se esfuerzan?

-Las dos cosas. Las matemáticas son como una escalera, necesitan continuidad, y si no se suben los primeros escalones es difícil seguir. Para enseñarlas bien es básico entusiasmar al alumno. Un profesor no enseña, entusiasma al alumno, le despierta el interés por aprender. Hay que tener fe en en los alumnos.

-Asegura que las matemáticas son ciencia y arte. ¿Dónde está el arte?

-Cuando un matemático investiga crea cosas, y crea con una inspiración de belleza. No hay lugar para las matemáticas feas. La investigación matemática es como un poema o una escultura. La belleza puede estar en la fórmula, en el enunciado, una belleza muy próxima a la música.

-¿Qué le parecen las medidas de ajuste que se están aplicando a las universidades españolas?

-Quizá no es el camino. La universidad debe ser un centro de investigación, y los países que han logrado un desarrollo más equilibrado son los que han creído en su universidad. Discutir, practicar, investigar y crear son la justificación de la existencia de la universidad.

-Sin embargo, se ha llegado a replantear la existencia de grados con muy pocos alumnos...

-Sería terrible que así fuera. A la universidad hay que medirla por su investigación, no por el número de alumnos que tenga. Si es así, organicen cursos de cocinero, y verán cómo tienen mucha demanda. La idea de aplicar las ideas que funcionan bien en la industria a la universidad no es válida. La universidad es un lugar de creación y debate, no una industria.