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Un conductor saluda a una de las voluntarias de Aspaym que colabora en la campaña de concienciación, en presencia del delegado del Gobierno y la jefa provincial de Tráfico.

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Un conductor saluda a una de las voluntarias de Aspaym que colabora en la campaña de concienciación, en presencia del delegado del Gobierno y la jefa provincial de Tráfico. VICENTE VICENS / AGM

Tráfico hará 6.500 controles de alcohol y drogas para frenar las muertes al volante

Más de la mitad de los fallecidos el año pasado en las carreteras de la Región habían tomado estupefacientes o iban bebidos al volante

LA VERDAD / EP

MURCIA.

Martes, 4 de junio 2019, 03:46

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Más de 6.500 conductores serán sometidos hasta el próximo domingo en la Región a pruebas de alcohol y drogas, en un nuevo intento de la Dirección General de Tráfico de atajar las muertes en el asfalto. Razones hay para esta campaña si se tiene en cuenta que el año pasado un total de 22 conductores, de los 41 fallecidos como consecuencia de un accidente de tráfico en la Región, habían consumido alcohol (en diez casos), drogas (otros diez), o alcohol y drogas (dos), lo que representa el 53% del total. El alarmante dato lo facilitó ayer el delegado del Gobierno, Francisco Jiménez, durante la presentación de la campaña especial de control de estas sustancias que se desarrolla a lo largo de toda la semana en las vías murcianas.

Jiménez dejó constancia de que, además, entre los 58 fallecidos en 2018 también había diez peatones, y en tres de ellos se hallaron pruebas de que habían consumido alcohol (1), drogas (1) o alcohol y drogas (1), según informaron fuentes de la Delegación del Gobierno.

Jiménez, acompañado de la jefa Provincial de Tráfico, Virginia Jerez, y del capitán de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, Agapito Cánovas, explicó que durante esta semana se controlará a alrededor de 6.500 conductores en 142 puntos de vigilancia establecidos a lo largo y ancho de la geografía regional. El porcentaje de denunciados durante la última campaña de esas características, en diciembre del año pasado, fue del 0,83%. «La alcoholemia mata, las drogas matan, y la única tasa segura es cero», advirtió Jiménez.

Casi tres veces más riesgo

La jefa Provincial de Tráfico recordó que este tipo de actuaciones salvan vidas y que realizar controles de alcohol y drogas no tiene otro propósito que retirar de la circulación a quienes, por haber consumido estas sustancias, ponen en riegos sus vidas y las de los demás. A medida que la concentración de alcohol en la sangre (BAC) aumenta en el conductor, la tasa de incidencia de accidentes también se incrementa de forma progresiva. En comparación con un conductor sobrio, la incidencia de accidente de un conductor con una tasa de alcoholemia de 0,8 gramos por litro de aire espirado (en España la tasa máxima es 0,3 gramos por litro) es 2,7 veces mayor.

Cuando el índice de alcoholemia es de 1,5 gramos por litro, la probabilidad de sufrir un accidente se estima que es 22 veces mayor que la de un conductor sobrio. En los primeros cuatro meses del año 2019 han fallecido en la Región quince personas por accidente de tráfico, trece de ellas conductores, un pasajero y un peatón. De los trece conductores fallecidos, nueve habían tomado alcohol o drogas.

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