La regulación de la eutanasia abre la puerta a un nuevo choque ideológico en la Región
PP y Vox anuncian una oposición frontal contra la iniciativa, cuyos defensores temen que la Comunidad boicotee cuando se apruebe
Con la disputa por el veto parental educativo todavía en carne viva, llega ahora otro asunto polémico que augura un nuevo choque ideológico en ... la Región entre progresistas y conservadores. El Congreso de los Diputados acordó ayer por amplia mayoría tomar en consideración la proposición de ley orgánica de regulación de la eutanasia, la primera iniciativa legislativa de calado que promueve el PSOE en el Parlamento tras la investidura de Pedro Sánchez y la constitución de su Gobierno de coalición con Unidas Podemos. La oposición frontal a la propuesta que exhibieron ayer PP y Vox es un avance de la tensión que puede generar la norma en una sociedad cada vez más polarizada. Ciudadanos, por su parte, se desmarcó del bloque de la derecha y, aunque expresó sus reservas con el texto que defienden los socialistas, concedió su apoyo inicial a la tramitación parlamentaria del mismo.
La proposición de ley del Grupo Socialista ya se ha debatido dos veces en la Cámara Baja, sin tanta crispación como ayer. Pero su trámite quedó en ambas ocasiones en el limbo por la disolución de las Cortes para la convocatoria de las elecciones generales del 28-A y el 10-N. Esta vez parece que a la tercera irá la vencida y la normativa pasa ahora a la comisión de Sanidad para la presentación de enmiendas. De aprobarse finalmente, la ley de eutanasia tendría vigencia en todo el territorio nacional, pero como las competencias de sanidad están transferidas serán las comunidades autónomas las que se encarguen de su aplicación. Y aquí es donde pueden venir los problemas en la Región, donde el Ejecutivo autónomo de PP y Ciudadanos depende del apoyo parlamentario de Vox. De hecho, asociaciones proeutanasia expresaron su temor de que en las autonomías en las que el partido de Abascal es decisivo (Murcia, Andalucía y Madrid) se pongan trabas al desarrollo de este «derecho a morir dignamente».
«No hay consenso»
Ya de primeras, el consejero de Salud, Manuel Villegas, se expresó ayer en contra de la proposición de ley tal y como la ha configurado el PSOE. «Antes hay que buscar un consenso lo más amplio posible», aconsejó Villegas, quien no es ni mucho menos un político ultraconservador y hace unas semanas llegó a mostrar sus reservas sobre el veto parental. En un tema tan sensible como este, el consejero entiende que «no se puede imponer» y echa en falta un mayor debate público con la participación de la ciudadanía, la comunidad sanitaria y todos los colectivos implicados.
Así lo ven
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Juan Luis Soto (PSOE): «Espero que no haya boicot desde la Región» Juan Luis Soto, diputado socialista por Murcia, confía en que no haya boicot por parte del Gobierno regional cuando la ley de eutanasia esté en vigor, «aunque cualquier cosa puede ocurrir con este Ejecutivo controlado por la ultraderecha». Juan Luis Soto se felicita de que «el PSOE, una vez más, vuelva a situarse a la cabeza de la defensa de los derechos sociales y las libertades individuales». Recuerda, asimismo, «el gran consenso social» que hay en España sobre la necesidad de regular la eutanasia, expresado en las encuestas del CIS.
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Joaquín Segado (PP): «Es una ley de suicidio asistido» No fue tan duro como su compañero José Ignacio Echániz, que acusó al Gobierno de buscar el ahorro en el gasto sanitario con esta ley de eutanasia. Pero también arremetió con dureza contra la iniciativa legislativa Joaquín Segado, portavoz del Partido Popular en la Asamblea Regional. «Es una ley de suicidio asistido, que abre la puerta a que cualquier persona se pueda quitar la vida». Como alternativa, los populares presentan la ley de cuidados paliativos, «que evitaría el sufrimiento innecesario de los enfermos sin plantear el suicidio».
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Juan José Molina (Ciudadanos): «Queremos conseguir un acuerdo amplio» El portavoz de Ciudadanos en la Región, Juan José Molina, matizó que su grupo ha vuelto a registrar la ley de dignidad al final de la vida, que considera complementaria con la que promueven los socialistas «para asegurar que todos y cada uno de los españoles podamos decidir en igualdad de condiciones ante una situación tan dolorosa». Molina justifica el apoyo de su partido a la propuesta del PSOE en el deseo de «debatirla para mejorarla y conseguir un amplio acuerdo». Cs plantea que la aplicación de la ley no quede en manos de las autonomías.
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Lourdes Méndez (Vox): «Que Dios perdone a todos» «Que Dios perdone a todos». Así finalizó su intervención en el Congreso de los Diputados Lourdes Méndez, diputada murciana de Vox, entre vítores de su bancada y mofas de la izquierda. «Esta ley traerá más dolor del que dicen querer evitar. Atacará los lazos familiares y la relación médico-paciente. Además, se ensañará con los más débiles y producirá una pendiente hacia la muerte imposible de controlar», aseguró Méndez, que acusa a Pedro Sánchez y sus socios «de intentar ejercer un poder supremo sobre la vida y la muerte de las personas».
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Ángel Hernández (Podemos): «La mayoría de la sociedad está a favor» «Ya era hora». Así se manifestó Ángel Hernández, responsable de Organización de Podemos en la Región, tras la admisión a trámite de la ley de eutanasia, «que llega 22 años después de la muerte de Ramón Sampedro, la persona que abrió este debate de la muerte digna en España». «Se garantiza un nuevo derecho», resaltó Hernández, que recuerda que la eutanasia tiene el apoyo de «la gran mayoría de la sociedad española, según las encuestas». «A la derecha se le llena la boca con la libertad con el pin parental, pero luego niegan la libertad de los ciudadanos a poner fin a su sufrimiento», reprochó.
Sí tiene claro Villegas que se trata de un tema que hay que abordar, como ya lo han hecho algunas comunidades autónomas. Pero aboga por «tener una ley de muerte digna, para dar seguridad a todas las personas que trabajan en los cuidados paliativos». E insistió en que es necesario el mayor consenso posible «para que las personas que están llegando a la última etapa de su vida gocen de una muerte digna y no tengan sufrimiento».
Tampoco el PP ve con buenos ojos la propuesta socialista aprobada ayer por el Congreso. Su vicesecretario de Comunicación en la Región, Joaquín Segado, cree que la eutanasia «es un nuevo intento de Pedro Sánchez de buscar la confrontación». «Van a estar toda la legislatura con temas polémicos como el 'pin parental', la eutanasia y la tipificación del delito de apología del franquismo. Así ocultan su incapacidad de mejorar la economía y crear puestos de trabajo». Segado descarta que las diferentes posturas de PP y Ciudadanos sobre este asunto puedan abrir fricciones en la Región. «No podemos estar de acuerdo en todo, somos partidos distintos», recuerda. Por ahora, el PP no contempla, aunque tampoco descarta, emprender una ofensiva en las instituciones en contra de esta ley de eutanasia.
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No comprende la posición del PP el diputado socialista por Murcia Juan Luis Soto, pues afirma que la proposición de ley impulsada por su partido «es muy equilibrada y garantista, puesto que establece unos supuestos muy claros para que se aplique la eutanasia y deja la puerta abierta a la objeción de conciencia de los profesionales sanitarios».
La postura de Vox en el Congreso la defendió la parlamentaria murciana Lourdes Méndez. Fue la más dura, acusando a la izquierda de convertir al Estado «en una máquina de matar» y recordando que la primera ley de eutanasia la desarrolló Hitler.
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