La Región se ahorrará 2.237 millones de euros financiándose a través del Estado

El Gobierno regional se ahorrará durante los próximos años 2.237 millones de euros gracias a los mecanismos extraordinarios de financiación que puso en marcha el Ministerio de Hacienda en el año 2012 para rescatar a las comunidades autónomas con problemas de liquidez y que no podían pagar las facturas. Dicho ahorro están en relación con el pago de intereses que habría tenido que asumir el Ejecutivo murciano si se hubiera financiado a través de la banca privada, con unos costes de mercado mucho más elevados que el 1% o el 0% que ofrece el Estado a través del FLA y el Plan de Pagos a Proveedores.

Este cálculo ha sido realizado por la Secretaría de Estado de Hacienda, con el fin de destacar «los beneficios» de los mecanismos adicionales de financiación a la comunidades autónomas durante el periodo 2012-2016. En este plazo, la Región de Murcia ha recibido casi 6.000 millones de euros del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), más otros 1.789 a través del mecanismo de pago a proveedores. Asimismo, 1.347 millones del Fondo Social han ido a las entidades locales, según las cifras del Ministerio de Hacienda.

Este dinero se ha destinado principalmente a pago de proveedores, vencimientos de deuda y el exceso de déficit. El ahorro de los costes financieros, calculado sobre el periodo de vigencia de las operaciones, que suelen ser de diez años, con dos de carencia, asciende a 51.982 millones de euros en el conjunto de las comunidades autónomas. En lo que respecta a la Región de Murcia, el mayor beneficio se extrae de los préstamos del FLA, que son los más cuantiosos.

Bien es cierto que los mercados de crédito tradicionales estuvieron prácticamente cerrados, coincidiendo con el plan de reestructuración bancaria y el desmoronamiento de las antiguas cajas de ahorros que obligó a su rescate financiero.

El informe del Ministerio destaca que el rescate de las comunidades autónomas con problemas de financiación se hizo inyectando una «elevada liquidez a unos costes muy reducidos, en un periodo de crisis económica que requería unas mayores necesidades de financiación y en un entorno de fuerte inestabilidad de los mercados financieros. Esta situación impedía acceder al dinero y en otros casos se exigían costes muy elevados que ponían en riesgo la sostenibilidad financiera de las comunidades autónomas».

El departamento de Cristóbal Montoro recuerda que en el año 2012, cuando se procedió al rescate autonómico y a la intervención de las cuentas, se había producido un «agravamiento de los impagos» a los proveedores de bienes y servicios, el cual se arrastraba desde 2004 debido a una caída sostenida de los ingresos unida al incremento de los gastos. Se produjo lo que el Ministerio llama «un importante stock de deuda comercial».

Se arbitró el mecanismo de pago a proveedores en tres fases, a través del cual la Región de Murcia ha recibido 1.787 millones de euros. Se solapó con el FLA, destinado a financiar los vencimientos de deuda y a cubrir el resto del endeudamiento generado por el incumplimiento de los objetivos de déficit. Murcia recibió las mayores cuantías entre 2014 a 2016. Ambos mecanismos quedaron englobados después en el Fondo de Financiación a las Comunidades Autónomas que sirvió para simplificar las gestiones. Finalmente, se aplicó el Fondo Social con el fin de atender los convenios suscritos entre las comunidades autónomas y los ayuntamientos para hacer frente al gasto de servicios sociales.

El debate está instalado ahora en las presiones de las comunidades autónoma del FLA para que el Ministerio de Hacienda condone y asuma como propia gran parte de la deuda generada por la insuficiencia financiera para atender las prestaciones en sanidad, educación y servicios sociales.