El PSOE roza con los dedos la alcaldía de Murcia mientras que el pesimismo se apodera del PP

Para que salga adelante la moción de censura –la primera en la historia del Consistorio– son necesarios quince votos. Justos los que suman los nueve concejales socialistas, los cuatro de Ciudadanos y los dos de Podemos. PP y Vox (14 ediles) votarán en contra. Con que uno falte, se equivoque o se desmarque, la propuesta descarrilará. Por eso la tensión es máxima, sobre todo tras lo ocurrido en la Asamblea, donde tres deserciones en Cs frustraron el intento de Ana Martínez Vidal y Diego Conesa de desbancar a Fernando López Miras.

No obstante, la moción parece estar bien amarrada por parte de sus promotores. Así, lo previsible es que José Antonio Serrano, candidato del PSOE, se convierta en alcalde en sustitución de José Ballesta, regidor desde 2015. Formaría gobierno con Cs, dependiendo de Podemos para sacar adelante cada año los Presupuestos. Mario Gómez, portavoz naranja y vicealcalde con Ballesta hasta hace una semana, lleva buscando este cambio de socios desde prácticamente el inicio del mandato. La incompatiblidad de Gómez con el PP, que viene del anterior mandato de Ballesta, se hizo presente desde el primer minuto, hasta llegar a un extremo insostenible cuando se cruzaron entre ellos denuncias ante la Policía Nacional, la Fiscalía y los juzgados. A comienzos de marzo, Cs tenía un preacuerdo con los populares para relegar a su portavoz en del equipo de gobierno. Pero en estas mismas fechas, y a la par, avanzaba con el PSOE en la moción de censura.

El PP, por su parte, parece haber tirado la toalla. José Ballesta transmite señales derrotistas, después de que su llamada a retomar el diálogo del pasado lunes no surtiera el menor efecto. Dejó entrever incluso que no continuará en la Corporación si hoy pierde el bastón de mando, regresando a su trabajo de catedrático en la Facultad de Medicina de la UMU.

El Ayuntamiento de Murcia se da por perdido y ayer los despachos estaban siendo recogidos. No obstante, la estrategia de Ballesta recuerda a la que siguió Fernando López Miras hace dos semanas. Se mostró públicamente resignado a dejar la presidencia de la Comunidad, a la vez que ultimaba el acuerdo con los tres rebeldes de Cs. Así que es difícil creer que los populares se crucen de brazos a ver cómo pierden el Ayuntamiento de la séptima ciudad de España. Lo intentarán hasta el último suspiro.

Por su parte, los concejales de Cs –Mario Gómez, Paqui Pérez, Pedro García Rex y Juan Fernando Hernández– se muestran hasta el momento firmes como una roca. Regresaron ayer a Murcia tras permanecer dos días en Madrid, con el fin de aislarse de las presiones que, aseguran, están sufriendo para cambiar el sentido de su voto. Los cuatro denuncian haberse sentido ninguneados por el alcalde y el PP, para sorpresa de este partido, sobre todo en los casos de García Rex y Hernández Piernas.

Si triunfa la moción, el médico José Antonio Serrano, jefe de Urgencias del Hospital Morales Meseguer, será alcalde de Murcia hasta 2023. El primer regidor socialista desde José Méndez. El futuro gobierno local contaría con trece concejales, de PSOE y Cs, uno menos que el equipo que José Ballesta ha dirigido hasta ahora. Nada ha transcendido por ahora del reparto de competencias. Los dos ediles de Podemos, Ginés Ruiz y Clara Martínez, se quedan en principio fuera del ejecutivo municipal.

El programa recoge 24 objetivos, con medidas como la realización de una auditoría de todos los servicios externalizados y un plan de reducción del gasto superfluo. Una oportunidad para dar cumplimiento a este último punto será la asignación de sueldos y liberaciones de ediles. También reducir cargos de confianza. Ahora mismo hay once puestos que dependen de la alcaldía.

El Pleno se iniciará a las 11.55 horas. Se constituirá una Mesa de Edad, formada por José Ángel Antelo y Felipe Coello. Precisamente este edil terminó de fracturar la coalición PP-Cs con su polémica vacunación contra la Covid-19. Tomará la palabra el candidato, José Antonio Serrano, para exponer su programa durante diez minutos. A continuación hablará el alcalde, José Ballesta, que tendrá otros diez minutos. Se abrirá un turno de siete minutos cada uno para los portavoces de los cinco grupos municipales: Rebeca Pérez (PP), Enrique Lorca (PSOE), Mario Gómez (Cs), José Ángel Antelo (Vox) y Ginés Ruiz (Podemos).

Después se votará. Se llamará uno a uno a los ediles, por orden alfabético, y tendrán que decir 'sí', 'no' o 'abstención'. Si no hay quince votos afirmativos (mayoría absoluta), la moción de censura decaerá y se levantará la sesión. Si los hay, Serrano será proclamado alcalde, prometerá su cargo y recibirá la Medalla de Oro de la ciudad y el bastón de mando.