Un planeta en la sartén
Protesta de Greenpeace frente a La Manga para alertar del cambio climático
LA VERDAD / EFE
LA MANGA
Jueves, 11 de julio 2019, 01:13
Más de una veintena de activistas de Greenpeace, que navegan por el Mar Mediterráneo para alertar sobre el calentamiento global, instalaron ayer una enorme sartén flotante con un planeta en forma de huevo frito frente a las costas de La Manga del Mar Menor. Junto a ella, podía leerse en una pancarta anexa «planeta frito».
Publicidad
En un comunicado, fuentes de la organización ecologista señalaron que la sartén, de doce metros de diámetro, 113 metros cuadrados de superficie, ocho metros de mango y más de 500 kilos de peso, «tiene en su interior un huevo frito, en cuya yema puede verse un mapa del mundo con el que se simboliza que el cambio climático dejará un planeta frito si no se toman medidas urgentes». Según explicó Greenpeace, «nos parecía un perfecto ejemplo para representar metafóricamente lo que cada vez se parece más a un caldo. Si no lo frenamos a tiempo, la laguna es un lugar donde algún día podríamos freír un huevo».
La iniciativa pretende concienciar del aumento de las temperaturas, especialmente en los océanos, que acumulan gran parte del calor
Ver fotos
Debido al cambio climático, causado por las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de la quema de combustibles fósiles, el planeta se está calentando más de lo que lo había hecho desde que existe la civilización humana. Los océanos acumulan la mayor parte de ese calor, lo que provoca borrascas y huracanes cada vez más intensos, fenómenos de «gota fría» y la subida del nivel del mar.
«Es una situación de emergencia y hay que responder con medidas», dice la organización
«Hemos convertido nuestro planeta en una olla que, a fuego lento, se va calentando poco a poco. Nuestros mares han absorbido hasta el 93% del exceso de calor retenido en el planeta por los gases de efecto invernadero, que emitimos por la quema de combustibles fósiles en un modelo económico y energético contaminante y peligroso», afirmó la organización.
Un 2024 sin emisiones
Con esta imagen, Greenpeace quiso solicitar a los gobiernos europeos que «reduzcan sus emisiones de dióxido de carbono hasta llegar a un balance neto 'cero' en el año 2040, con el objetivo de evitar que las temperaturas globales aumenten por encima de 1,5 grados centígrados, tal y como se comprometieron en el Acuerdo de París». «Hay que actuar antes de que el océano y el resto del planeta se conviertan en una sartén hirviente que haga imposible la vida», declaró Tatiana Nuño, responsable de la campaña de cambio climático de Greenpeace. Explicó, asimismo, que el objetivo propuesto por el actual Gobierno central para reducir las emisiones en España «es insuficiente».
Publicidad
«Las soluciones también están en manos de la ciudadanía. Ya somos muchas las personas que estamos tomando las riendas y hemos optado por otras alternativas energéticas», sostiene Greenpeace. «Este problema es global y nuestro planeta no merece un final así».
La organización ecologista sostiene que «nos encontramos en una situación de emergencia climática, a la que hay que responder no solo con declaraciones, sino también con objetivos y medidas políticas contundentes y efectivas». El barco de Greenpeace, 'Rainbow Warrior', se encuentra recorriendo las costas europeas en su campaña 'En marcha por el clima', con la que pretende concienciar a la población sobre esta problemática. Tras visitar el litoral de Rumanía, Bulgaria, Grecia e Italia, el navío estará en España durante un mes, recalando en los puertos de Barcelona, Málaga y Vigo.
Prueba LA VERDAD+: Un mes gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión