'Emilia' vuelve a repicar

Durante estos meses, la parroquia ha utilizado un sistema de megafonía que suplía el sonido de las campanas avisando de las distintas celebraciones parroquiales y del horario del reloj de la torre. Las campanas, que durante décadas han recordado a los vecinos sus obligaciones espirituales, son todo un símbolo. La iglesia de Archena siempre dispuso de campanas pequeñas, que estaban colgadas de la fachada principal. Sin embargo, el primer bronce importante, el más grande, adquirida por 103 reales, se colocó en el templo en el año 1734.

Las actuales campanas datan de 1927, la más grande (llamada 'Emilia'), y de 1948, la más pequeña. En el cuerpo de la mayor se pueden apreciar distintos relieves, correspondientes a representaciones de querubines y serafines, inscripciones referentes a Jesucristo y María, el escudo de la fundición responsable de la construcción de la campana, cuatro castillos protegidos por dos leones y distintos motivos vegetales a modo de decoración, entre otros ornamentos. La segunda campana de la parroquia, la más pequeña del binomio, es de hierro colado. El material escogido para su fundición denota la falta de presupuestos después de la Guerra Civil. Los relieves que decoran esta campana son más escuetos y se reducen a una inscripción en donde no se puede apreciar con claridad la fundición que la realizó, el año de construcción y los distintos elementos vegetales.