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Vallas en el patio del Instituto Sierra Minera de La Unión, ayer. antonio gil / agm

Educación empieza a pavimentar el patio de dos institutos de La Unión contra los metales pesados

La Consejería admite el riesgo potencial del suelo en el Sierra Minera y el María Cegarra, y echará hormigón para proteger a estudiantes y docentes

Sábado, 28 de septiembre 2019, 02:13

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Más de dos años después de las primeras denuncias de padres y vecinos de la Sierra Minera, la Comunidad Autónoma ha admitido la existencia de un riesgo potencial para los cientos de alumnos de dos institutos públicos de La Unión por la exposición a metales pesados procedentes de los residuos mineros. Por eso, al igual que hizo en el verano de 2017 en el colegio cartagenero San Ginés de la Jara, de Llano del Beal, donde fueron detectados «niveles elevados de plomo y arsénico con potencial tóxico y cancerígeno», la Consejería de Educación pavimentará el patio del Instituto de Enseñanza Secundaria (IES) Sierra Minera y del IES María Cegarra Salcedo. Entre medias, la pasada primavera el Ayuntamiento de Cartagena actuó de similar forma en el colegio Estrecho de San Ginés, llamado igual que el del Llano.

El departamento que dirige María Esperanza Moreno ha iniciado esta semana las obras de impermeabilización, mediante la colocación de los correspondientes vallados. Se trata de conseguir un sellado «total», mediante una «solera de hormigón en las zonas exteriores que no están pavimentadas», explicaron en el Ejecutivo autonómico.

Las obras durarán un mes y tienen un presupuesto aproximado de 200.000 euros. Para garantizar el acceso a profesores y estudiantes, han sido habilitadas zonas de paso alternativas y «se ha organizado la actividad docente de forma que pueda desarrollarse con la mayor normalidad» posible, añadieron.

«No existe un peligro inminente, pero sí una situación que podría ser un riesgo. Por eso, hemos decidido actuar con las obras de pavimentación y siempre siguiendo criterios estrictamente técnicos», afirmaron en la Consejería. Y subrayaron que, «ante cualquier atisbo de duda, la Comunidad Autónoma actúa».

En Educación añadieron que «en base a un requerimiento que nos hizo la Dirección General de Medio Ambiente, se ha hecho un estudio del suelo de los centros de titularidad de la Comunidad Autónoma. Y viendo las conclusiones del estudio, se ha actuado poniendo las medidas necesarias para evitar cualquier riesgo, tanto del alumnado como del personal docente, en coordinación con Medio Ambiente y Salud pública», precisaron en Educación. E indicaron, también, que «con estos trabajos se ha proporcionado a la Dirección General de Medio Ambiente la información relativa a la calidad ambiental de los suelos».

Enrique Viviente y Portmán

En el caso de estos institutos, la Plataforma de Afectados por los Metales Pesados de la Sierra Minera lleva dos años denunciando la necesidad de pavimentar los colegios y de restaurar distintas balsas de residuos. El colectivo reclama también actuar en el colegio de educación especial Enrique Viviente, situado en la zona del IES Sierra Minera, y en el colegio de la pedanía de Portmán.

La plataforma, a la que asesora el científico especialista en suelos José Matías Peñas Castejón, citó la vieja fundición de plomo El Porvenir y el depósito El Descargador (que acumula restos del antiguo Lavadero La Belleza), ambos propiedad del conglomerado de empresas de Portmán Golf. Peñas no ha dejado de exigir rapidez para proteger a menores, docentes y padres, frente al contacto con el material contaminante a través del suelo y del aire.

Fuentes de Portmán Golf precisaron que los centros fueron construidos sobre terrenos cedidos por los antiguos propietarios de las explotaciones mineras. La mercantil añadió que cumple la normativa en todos sus emplazamientos. Las partículas con metales pesados, recuerdan, se depositan en los centros educativos a través del viento y de la lluvia, desde escombreras que, en algunos casos, están a apenas unos metros de distancia.

Precedentes en Llano del Beal y Estrecho y diligencias judiciales

Las obras de pavimentación en los institutos de La Unión tienen como precedentes actuaciones similares en Cartagena. En Llano del Beal, una denuncia de la Plataforma de Afectados por los Metales Pesados ante el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil obligó a la Consejería de Educación a encargar un informe ambiental sobre el estado del suelo. Los resultados llevaron a realizar obras urgentes para pavimentar las zonas de recreo que hasta entonces eran de tierra y sustituir ventanas. Respecto a este centro, está pendiente la restauración de la cercana balsa San Agustín, una obra de protección de los escolares reclamada por la Consejería de Medio Ambiente a Portmán Golf y al Ayuntamiento, que ha encargado un estudio ambiental. La presión de los padres acabó movilizando también en el Estrecho a la institución municipal, que no obstante no hormigonó el patio hasta el pasado mes de abril. Los juzgados de Cartagena tienen abiertas varias causas, donde está personada la Fiscalía, por la contaminación de varios centros de la Sierra Minera.

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