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Viernes, 30 de septiembre 2022, 02:19
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Las obras de construcción de la vía verde de la floración ya han comenzado, lo que conlleva el desmantelamiento de unos once kilómetros de la antigua vía férrea en el municipio de Cieza. Este hecho estrangula definitivamente la aspiración de los vecinos de Calasparra y de todo el Noroeste de volver a conectarse por tren con Murcia y Madrid después de que en marzo de 2019 comenzara a funcionar la variante de Camarillas, dejando a la estación calasparreña sin servicio de trenes.
Sin embargo, esta retirada de las vías ha llevado a la alcaldesa de Calasparra, Teresa García, a «emprender otros caminos», y para ello, hace dos semanas se reunió con el alcalde de Hellín, el también socialista Ramón García, «para trabajar conjuntamente por la puesta en marcha de un tren de cercanías que conecte Calasparra con Hellín, y de ahí, que los ciudadanos del Noroeste puedan viajar a Murcia o Madrid en tren».
«A mí no me gusta que se estén retirando los raíles, y así se lo he hecho saber alcalde de Cieza, Pascual Lucas, con el que solo he hablado una vez de este asunto». «Por ello –dijo– quiero explorar otras vías alternativas para que no nos quedemos aislados». Mientras tanto, para los partidos de la oposición de Calasparra, el desmantelamiento ha sido calificado como «una traición de José Vélez a su pueblo con el beneplácito de la actual alcaldesa», manifestó Alonso Torrente, concejal del grupo independiente Calasparra Viva, quien calificó la idea de Teresa García de poner en marcha un cercanías por Hellín como «una ocurrencia de sainete, hecha sin sentido y pensando solamente en las elecciones que se acercan».
Sobre la retirada de las vías, Torrente indicó que se trata «de una maniobra hecha con el sigilo propio de quien no hace el bien, levantándose varios kilómetros de vía del ferrocarril en buen estado, que unían Calasparra y Cieza, y que serán llevados a otros lugares donde sí creen en el transporte público». Subrayó, además, que tanto Vélez como García «prometieron públicamente que esto jamás iba a suceder, pero la evidencia pronto delata a políticos fuleros que dan más valor a su sillón que a la defensa de los intereses públicos de los ciudadanos que representan».
El delegado del Gobierno y exalcalde de Calasparra, José Vélez, reiteró sus palabras de hace dos semanas y señaló que la Comunidad Autónoma «ha estado presionando para poder construir una vía verde en ese tramo». Una vez confirmado el desmantelamiento, «lamento profundamente la decisión y la oportunidad perdida para crear un cercanías desde el Noroeste hasta Cieza y desde ahí poder enlazar hacia Cartagena y Madrid, pero es el Gobierno regional el que tiene que responder ante los ciudadanos por qué ha sacrificado el interés general, exigiendo a Adif el levantamiento de las vías a cambio de 900.000 euros, que es el importe de la subvención de los fondos Feder con el que pretenden hacer la vía verde».
Además de la retirada de las vías, estas obras incluyen el acondicionamiento del firme, un paso sobre el barranco del Galán, sistemas de drenaje, señalización, protecciones de madera, áreas de acogida y descanso, plantación de medio millar de árboles autóctonos y acondicionamiento de elementos ferroviarios.
Según la Comunidad Autónoma, esta nueva infraestructura permitirá conectar con la Vía Verde del Chicharra, el Camino de la Vera Cruz de Caravaca y, posteriormente, con la Vía Verde del Noroeste, con lo que reforzará la red regional de caminos y vías verdes y servirá para promover la movilidad sostenible y el ecoturismo.
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