El Ayuntamiento de Librilla y la plataforma reúnen en un día el dinero para comprar Las Posadas
El equipo municipal ya trabaja en el proyecto de restauración para optar a una subvención estatal de hasta 3 millones de euros
Están «enormemente satisfechos», tanto el equipo de gobierno como los integrantes de la Plataforma en Defensa de Las Posadas del Duque de Alba y los ciudadanos que apostaron por invertir «en cultura y en suelo», explica Antonio Huertas, concejal del Ayuntamiento de Librilla y uno de los artífices de la operación que finalmente va a permitir salvar de la ruina el edificio neoclásico de la localidad.
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Proyectado y construido entre 1765 y 1779 por el marqués de los Vélez, Antonio Álvarez de Toledo, que concluyó su hijo José Álvarez de Toledo, marqués de Villafranca, duque de Medina Sidonia y duque de Alba, este martes los responsables de la 'operación Salvar Las Posadas' pudieron finalmente hacer efectivo el pago de los 251.000 euros –el total de la puja ascendía a 290.000– que restaban para satisfacer el importe que el inmueble alcanzó en la subasta de la Agencia Tributaria (Aeat). Fue después de que en tan solo 24 horas 30 pequeños inversores, la mayoría vecinos de Librilla, se comprometieran a adquirir las 50 participaciones de 7.500 euros a cambio del derecho equivalente a 100 metros cuadrados del terreno aledaño al histórico edificio y con el compromiso firmado de ceder su propiedad al Ayuntamiento de Librilla.
A la espera de que la Dirección General de Patrimonio eleve al Consejo de Gobierno la catalogación del edificio como bien de interés cultural (BIC) para poder hacer efectiva su cesión, el equipo de gobierno municipal y la Plataforma en Defensa de Las Posadas del Duque de Alba ya trabajan en la siguiente fase de la 'operación Salvar Las Posadas'.
El edil Antonio Huertas hizo efectivos este martes los 251.000 euros restantes de la puja a Hacienda
Tienen hasta el 12 de mayo para concurrir a las subvenciones del 'Programa de mejora de la competitividad y de dinamización del patrimonio histórico con uso turístico' convocadas por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que son de un máximo de 3 millones de euros. «Para presentarnos son requisitos imprescindibles que Las Posadas esté declarado BIC y se haya hecho efectiva su cesión al Ayuntamiento», detalla Huertas, que está convencido de que si el BIC se declara, como fecha tope «hasta el 5 de mayo, tenemos tiempo para concurrir».
De hecho, el equipo de gobierno y la plataforma ciudadana ya tienen planteado un calendario de trabajo para cumplir los plazos marcados y están trabajando en la memoria del proyecto de restauración. «Contamos con la ventaja de que hay varios estudios académicos –tesis y trabajos fin de grado– realizados por miembros de la plataforma sobre la historia, la arquitectura del edificio, su restauración y su posible puesta en valor, en concreto, de Fernando Barquero y del arquitecto José Manuel Guillermo», aclara Huertas. Son precisamente los documentos que usarán de base para llegar a tiempo a la convocatoria y, aunque aún tienen que ajustar el presupuesto, «las valoraciones iniciales, con cubiertas, fachadas y demás elementos estructurales incluidos, son inferiores a 3 millones de euros», avanzan desde Librilla optimistas y «contentos» de que esta novedosa iniciativa haya permitido hacer partícipes a los vecinos del proyecto y de la conservación del patrimonio histórico.
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Recuperar el alma del edificio del siglo XVIII
«Ejemplo no solo regional, sino probablemente nacional, de la tipología de alojamientos y casas de postas que se desarrollaron en España a finales del XVIII», como reza el expediente para su declaración como bien de interés cultural a punto de aprobarse, la idea es que con su restauración se recupere su alma y, en parte, se dedique a la restauración y al hospedaje de calidad como en su origen. Una actividad que, considera el edil Antonio Huertas, serviría para generar los ingresos suficientes –por adjudicación– para mantener el resto del edificio, que acogería un museo etnográfico, salas de exposiciones y actividades culturales variadas.
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