Los daños provocados por la lluvia en Molina obligan a reubicar a 190 escolares
El episodio de tormenta y granizo del martes inundó parte del colegio San Antonio, en el que se realizaba una retirada de amianto de la cubierta
Los alumnos del colegio San Antonio de Molina de Segura no pudieron asistir ayer a clase debido a los daños que causó la lluvia caída el martes en las aulas del centro, donde se estaban llevando a cabo obras en el tejado para la retirada de amianto. Ante la previsión de que las reparaciones se prolonguen durante varios días, los responsables del centro y de la Consejería de Educación han buscado alternativas para reubicar a los estudiantes.
La concejala de Educación, María Hernández, ha confirmado a esta Redacción que, finalmente, 170 escolares de tercero a sexto de Primaria serán reubicados en el colegio Cervantes, una vez que las directoras de ambos centros se reunieron para acordar la forma de proceder. Previsiblemente no podrán reanudar las clases en el San Antonio hasta el martes próximo –el lunes es festivo en Molina–, ya que la Consejería ha dado orden para que a partir de hoy se efectúen labores de limpieza y traslado del mobiliario necesario para instalarlo en el citado centro de San Roque.
Además, la veintena de niños de 2 años matriculados este año en San Antonio serán reubicados en la escuela infantil de Cañada de las Eras, según indicó la edil. Sin embargo, los escolares de Infantil, de 1º y 2º de Primaria, y el aula abierta que atiende a menores con necesidades educativas especiales permanecerán en el colegio San Antonio, al que está previsto que regresen hoy mismo.
Se desplazarán a Cañada de las Eras 20 niños de 2 años y el Cervantes acogerá a 170 de Primaria
La Consejería de Educación quiere aligerar los trabajos para que los escolares regresen lo antes posible a su colegio habitual, pero no se sabe con certeza el tiempo que trascurrirá. Se estima que, al menos, dos semanas o un mes tendrán que permanecer en las aulas de San Roque los 170 alumnos afectados.
Lo primero que harán los técnicos será proteger el techo de las instalaciones afectadas ante la previsión de nuevas lluvias. Una vez protegido, se procederá al secado y a la reparación. La intención es que, una vez esté garantizada la seguridad, los alumnos vuelvan a las aulas, aunque esté pendiente pintar las paredes.
Por su parte, el PSOE ha denunciado que las obras de los colegios San Antonio y San Miguel, en las que se está retirando el amianto, no han concluido y el alumnado ha empezado las clases en mitad de la construcción.
Caos, según el PSOE
«Nadie puede entender la falta de previsión y el caos del inicio de curso», dijo ayer en este sentido la portavoz socialista, Isabel Gadea. «Literalmente se ha tenido que inundar el colegio porque han comenzado las clases sin techo; es algo inaudito», sentenció Gadea, quien afeó que el alcalde de Molina fuera a interesarse por lo sucedido «con cámara de televisión en mano». Indicó además que «son otros siete centros en el municipio los que aún tienen amianto y, como siempre, el Gobierno regional nos coloca a la cola en educación».
