Paralizan las obras de una granja de cerdos en Mazarrón porque la empresa no tiene licencia
«La instalación porcina estaría ubicada a menos de 1.000 metros de las casas de los vecinos, lo que es ilegal», sostiene el alcalde
El Ayuntamiento de Mazarrón paralizó esta semana los trabajos de una empresa que quiere instalar una granja porcina en la pedanía de La Atalaya. El alcalde, Gaspar Miras, explicó que «el lunes hubo movimiento de tierras por parte de la promotora, que carece de licencia. Este hecho alarmó a los vecinos, por lo que se ordenó que se paralizaran esos trabajos».
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El proyecto prevé la instalación de una granja de cerdos con 2.000 cabezas. Sin embargo, la promotora, pese a haber solicitado el pasado verano todos los permisos, no cuenta con autorización municipal para comenzar el proyecto. El regidor sostiene que «los informes de Urbanismo son desfavorables. Les hemos requerido más documentación, pero por el momento no nos han remitido nada más».
El problema, según Miras, es que este jueves regresaron los operarios a los terrenos para continuar con los trabajos. «Ya levantamos acta, y ahora volveremos a requerir al promotor que paralice las obras, aunque sean solo de limpieza y movimiento de tierra, porque no tiene permiso alguno».
«La instalación porcina estaría ubicada a menos de 1.000 metros de las casas de los vecinos, lo que es ilegal. Estamos en contacto diario con los ciudadanos de La Atalaya, apoyándoles, pues no vamos a permitir que se cometa ilegalidad alguna con esta instalación», subrayó Miras.
La propietaria del terreno y gerente de La Portilla, Carmen López, sostiene que «solo estamos realizando tareas de limpieza para quitar los residuos agrícolas abandonados. Ya he retirado kilos y kilos de plásticos que los agricultores habían enterrado en mi terreno». Añade que «sí tengo los permisos correspondientes para hacer estas labores, y además quiero dejar claro que hay más de un kilómetro de distancia con el núcleo urbano de la pedanía, por lo que cumplo con la ley». «Existen otras granjas en la zona que se sitúan a menos de un kilómetro, y nadie dice nada. Yo tengo todos los permisos, y estoy a la espera de que nos den la licencia de obras para empezar con la instalación», añade López.
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