Luján aún no tiene competidor para el rectorado de la UMU

Más allá de su declaración de intenciones, el catedrático del Departamento de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social, quien se impuso a otros cuatro candidatos en los comicios de marzo de 2018, ha enseñado ya sus mejores cartas, y ha anunciado tres incorporaciones de mucho peso y que minarían la moral de futuros adversarios. Luján ha 'fichado' para su equipo un trío de ases: los decanos de Letras, Pascual Cantos; de Biología, Alfonsa García; y el catedrático en el departamento de Métodos Cuantitativos para la Economía y Empresa y coordinador del Comité de Expertos en el Modelo de Financiación, Antonio Calvo Flores.

Los tres son pesos pesados en la institución, y además representan tres áreas de conocimiento. Calvo-Flores ya fue vicerrector de Economía e Infraestructuras en el mandato de José Antonio Cobacho, en una etapa en la que las negociaciones con la Comunidad para ajustar los presupuestos en plena crisis fueron muy tensas. Luján le ha fichado con un cometido claro: la negociación del nuevo plan plurianual de financiación de la Universidad.

La decana de Biología ha sonado en varias ocasiones como posible candidata a rectora, es catedrática de Biología Celular y académica de número de la Academia de Ciencias de la Región de Murcia, y ya participó en 2014 en otras elecciones al Rectorado como integrante de la candidatura de Francisco de Asís Martínez (Quete).

El área de Ciencias tiene además mucho peso en las elecciones, ya que concentra a un número elevado de catedráticos, cuyo voto cuenta más en el resultado. Su participación en estos comicios podría tener además recorrido: algunas voces apuntan que, de cumplir con un buen mandato, Alfonsa García podría plantearse como candidata a rectora en 2026. Pascual Cantos es decano de la Facultad de Letras y catedrático de Filología Inglesa, otra de las facultades con mayor número de votos 'de calidad' por la concentración de catedráticos y titulares.

Con la aprobación de los nuevos estatutos aún pendiente, los comicios se regirán de acuerdo al reglamento de siempre, que establece un sistema de voto ponderado que, en la práctica, da mayor capacidad de decisión a los catedráticos y profesores titulares. Su opinión y sus votos sientan cátedra, y 'valen' mucho más en el escrutinio de papeleras que los de varios centenares de estudiantes y administrativos juntos.

Tanto el rector como el Claustro de la institución son elegidos por sufragio universal ponderado, lo que significa que las papeletas tienen diferente 'valor' en el recuento según el grupo al que pertenezca el votante. Los votos de los miembros del Grupo A, compuesto por los profesores doctores y catedráticos funcionarios, cuentan el 51% del total. Cuando se realiza el recuento, corresponde a la Junta Electoral Central de la Universidad aplicar, tras el escrutinio de los votos, los coeficientes de ponderación que correspondan para darles su verdadero valor, que en este caso es decisorio. La participación del Grupo A en los comicios suele ser elevada, superior al 65%.

Las papeletas del Grupo B, formado por el resto de personal docente e investigador, tienen asignado un 14% del porcentaje. El Grupo C, que es el de los estudiantes, tiene una cuota del 25%; y el D, integrado por el personal de administración y servicios, tiene asignado el 10%. Con este sistema, cuestionado por muchos, el voto de los doctores funcionarios es el que finalmente decide el resultado de las elecciones.

El calendario electoral ha arrancado con la exposición del censo. Tras su publicación definitiva, se abrirá el plazo de presentación de candidaturas, que podría albergar aún alguna sorpresa de última hora. De no ser así, Luján reeditaría las elecciones celebradas en 2010, en las que José Antonio Cobacho fue el único candidato, también después de haber completado un mandato los cuatro años anteriores. Como ocurrió en aquella ocasión, la contienda 'Luján contra Luján' restaría emoción e interés al debate universitario y a la votación: en 2010, la participación se redujo al 13,2%, y Cobacho logró el 67% de los respaldos. Solo o con adversarios, el actual rector desplegará buena parte de su campaña electoral a través de las redes sociales y de internet. Las votaciones serán el 22 de febrero y, en principio, parece poco probable que haya que ir a una segunda vuelta.