Una línea de autobús a demanda intenta romper el aislamiento de la Región de Murcia vaciada

Con el fin de romper el aislamiento que a veces padecen las zonas rurales alejadas de los cascos urbanos municipales, el Gobierno regional tiene previsto poner en marcha un sistema de transporte a demanda en pedanías en riesgo de despoblación de Moratalla, Caravaca, Calasparra y Cehegín.

Este nuevo proyecto establecerá y mantendrá un servicio de transporte no se sujeto a horarios o rutas fijos, sino que se adaptará a las necesidades de los habitantes de las zonas afectadas para facilitar el acceso a núcleos principales de población o cabeceras de comarca con el fin de permitir el traslado a servicios sanitarios, sociales, educativos, comerciales, administrativos o de ocio.

La iniciativa se centra en los municipios de la comarca del Noroeste, porque esta zona de las Región es donde con más nitidez se padece el fenómeno de las 'España vaciada', que alude a la paulatina pérdida de habitantes que amenaza a poblaciones con el abandono total.

En este caso, se trata de un proyecto piloto susceptible de aplicarse en otras zonas y que podría comenzar a funcionar a finales de abril o en los primeros días de mayo, prestando servicio a las 7.239 personas que viven en las pedanías de estos cuatro municipios. El coste de esta primera fase de prueba, que se prolongará un año, asciende a 400.000 euros.

La medida forma parte de la estrategia impulsada desde la Dirección General de Administración Local para combatir la despoblación en determinadas áreas de la Región mediante la implantación de medidas que contribuyen a mantener los habitantes en las zonas a las que se dirige o incluso atraer a nuevos vecinos.

Este servicio se ha diseñado con la colaboración de la Dirección General de Movilidad de la Consejería de Fomento e Infraestructuras. Para ello se ha realizado un estudio de las pedanías que tienen más necesidades de comunicación por carecer de servicio de transporte tradicional. En concreto, se han establecido una decena de rutas que recorrerán veinticinco pedanías de Caravaca, Cehegín, Moratalla y Calasparra.

El objetivo de la medida es que cualquier usuario que tenga necesidad de viajar hasta el casco urbano de su municipio para realizar cualquier tipo de gestión, por ocio o para enlazar con otro medio de transporte que parta desde ahí, pueda hacerlo avisando mediante una llamada de teléfono con 24 horas de antelación. De esta forma ese día tendría a su disposición el transporte de ida y vuelta.

El servicio tendrá previsiblemente una especial demanda los días de mercado en Caravaca, Cehegín, Calasparra y Moratalla y, en algunos casos, por las tardes para poder acudir a actividades extraescolares o al conservatorio de música, entre otros destinos.

Las rutas y horarios de utilización se irán adaptando una vez que comience a funcionar y se observe el comportamiento y las necesidades de los usuarios.

El coste para el usuario será similar al que pagaría por un billete en una línea regular de viajeros. Dependiendo de los kilómetros que recorra, los billetes oscilarán entre 1,5 € y 5 €.

Está previsto que para este transporte se utilicen vehículos con un número de plazas adaptadas a la demanda, principalmente minibuses de 16 plazas.

El proyecto está en sintonía con otras iniciativas puestas en marcha por la Consejería de Presidencia, Turismo, Cultura, Juventud, Deportes y Portavocía para que los vecinos tengan acceso a otros servicios básicos.

Este es el caso de la instalación de trece cajeros automáticos para combatir la exclusión financiera en zonas afectadas por la despoblación en Ojós y Ulea y pedanías de Moratalla, Caravaca de la Cruz, Cehegín, Bullas y Lorca. La iniciativa, desarrollada mediante un convenio con CaixaBank y Cajamar, cuenta con una inversión del Gobierno regional de 600.000 euros.

Precisamente ayer, el director general de Administración Local, Francisco Abril; el alcalde de Moratalla, Jesús Amo, y el director Centro Instituciones Región de Murcia de CaixaBank, Antonio Francisco García, visitaron la pedanía moratallera de El Sabinar, donde se ha instalado un cajero automático.

«El objetivo que perseguimos desde el Gobierno regional con el nuevo servicio de transporte bajo demanda, al igual que con la puesta en servicio de cajeros automáticos, es contribuir a la igualdad efectiva de derechos y oportunidades de los ciudadanos del medio rural en la Región», indica el consejero de Presidencia, Cultura, Turismo y Deportes, Marcos Ortuño.

«Con el nuevo sistema de transporte mejoraremos la cohesión territorial vertebrando realmente nuestro territorio y asegurando que los ciudadanos de nuestra Región, con independencia de dónde residan, tengan acceso a los servicios públicos básicos adecuados y suficientes, atendiendo especialmente a personas mayores y personas con discapacidad. Eso es mejorar la vida de las personas, que es en lo que estamos centrados en el Gobierno regional», agregó el consejero.