La insólita escena de unos ladrones que entran en una casa de Jumilla sabiendo que los están grabando

No son pocos los métodos que utilizan los ladrones para perpetrar un robo. Algunas tácticas destacan por su rapidez y profesionalidad, como la reciente sustracción en la tienda Apple de la Nueva Condomina cometida por una banda que portaba gorros de Papá Noel para pasar desapercibidos por la calle. Otras, en cambio, resultan menos victoriosas, como el caso de un hombre que le pillaron escondido debajo de la cama cuando asaltaba un domicilio de Molina de Segura.

Una de las técnicas más populares que emplean los 'amigos de lo ajeno' para irrumpir en los hogares es la conocida como 'método del escalo' o 'ladrón Spiderman'. Como su nombre indica, consiste en trepar la fachada de un inmueble para acceder al interior a través de las ventanas y balcones. Un sistema con el que consiguen entrar a una vivienda en cuestión de segundos sin la necesidad de forzar la puerta de entrada.

Un vecino de Jumilla fue testigo de este 'modus operandi' y no dudó en grabarlo para que quedara constancia de los hechos. Tras cerciorarse de lo que estaba ocurriendo, alzó su voz desde la ventana para ahuyentar a la pareja de ladrones: «Estoy llamando ya a la Policía. Está ya grabado», advirtió mientras los individuos hacían caso omiso a la advertencia.

En la grabación, compartida en X por el usuario @SocialDrive_es, se observa a uno de los integrantes escalando el muro frontal de un dúplex mientras el otro permanece en la acera para vigilar la zona. Poco más de quince segundos es lo que tarda el varón para ascender la pared y colarse en el interior. «¡Ha abierto la persiana entera!», exclama el testigo ante la fugaz actuación del hombre.

Ni la insistencia de este vecino para que cesen el atraco ni la presencia de unos viandantes en medio de la escena dan sus frutos. El delincuente, vestido de negro, culmina el hurto en tan solo minuto y medio, de los cuales, invierte menos de 60 segundos en el interior. El ladrón desciende nuevamente el muro con serenidad y apariencia tranquila, sin correr y con algún objeto entre las manos. «¡Eso tiene dueño!», le esgrime el vecino cuando el individuo se dispone a huir del lugar.

La escena horrorizó a este testigo, que al ver el sosiego con el que actuaban a pesar de haberlos pillado 'infraganti' temía que regresaran para adentrarse en otra. «Igual que se han colado ahí, se pueden colar en la casa de la prima», expresó con espanto. Finalmente, los dos hombres concluyeron su actividad con éxito y sin pavor por haber sido grabados con las manos en la masa.

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