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Domingo, 3 de marzo 2019, 08:27
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Tres meses después de su primera visita como nuevo presidente nacional del PP, Pablo Casado volverá a la Región de Murcia el próximo sábado. Entonces fue para asistir a la presentación de las candidaturas de Fernando López Miras y José Ballesta a la presidencia de la Comunidad Autónoma y a la alcaldía de Murcia, respectivamente, y en esta ocasión será para respaldar a Noelia Arroyo como aspirante a la alcaldía de Cartagena.
Es un adelanto del peso y protagonismo que la Región de Murcia tendrá en la campaña nacional del PP para las elecciones generales del 28 de abril, gracias en buena parte a la presencia del secretario general del partido, el ciezano Teodoro García, como número uno de la lista por Murcia para el Congreso. Podría haber optado, como mano derecha de Casado, por ir en la candidatura de Madrid, pero ha preferido repetir por Murcia, tanto por el realce político que eso le proporcionará a su tierra como por tratarse de una de las zonas del máximo interés estratégico para el partido, como es el arco mediterráneo.
Una de las grandes ciudades de esta área geográfica que esperan recuperar los populares tras las elecciones locales y autonómicas del 26 de mayo es Cartagena, ahora gobernada por un PSOE en minoría.
La exconsejera de Transparencia pidió a Casado que asistiera a su presentación durante la pasada convención nacional del partido, celebrada en Madrid, y el presidente del PP ha accedido encantado a visitar una ciudad con la que su mujer, natural de Elche, tiene lazos familiares.
El acto tendrá lugar, a las 12.30 horas, en el patio del antiguo Hospital de Marina, en el campus de la Muralla de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT), un escenario elegido con toda la intención por la candidata popular, ya que la UPCT ocupará un lugar fundamental en el programa electoral y en la campaña de Noelia Arroyo. Es la universidad, además, en la que Teodoro García Egea cursó sus estudios de Ingeniería Industrial.
El secretario general del PP también estará presente en el estreno mitinero de Arroyo, quien hasta el pasado miércoles, en que dejó el Gobierno regional, aunque no ha cesado de trabajar en su candidatura y de participar en multitud de actos en la ciudad portuaria, ha preferido mantener un perfil electoral discreto.
El líder nacional del PP tendrá un día completito en la Región el próximo sábado, ya que antes de viajar a Cartagena, Pablo Casado tiene previsto pasar por Cieza para presenciar la floración de los frutales, de la que recibirá cumplida explicación del propio Teodoro García. Les acompañará el presidente regional del partido, Fernando López Miras, quien también está programado que intervenga en el acto del campus de la Muralla.
El ajetreo preelectoral aún no ha permitido al secretario general centrarse en la configuración de la candidatura por Murcia para el 28-A. En estos momentos priman sus responsabilidades nacionales, como son la designación de los números uno por cada circunscripción y atender compromisos personales de precampaña. Ayer, por ejemplo, tenía la agenda cubierta con actos en los municipios albaceteños de Elche de la Sierra y Socovos. Teodoro García residió hasta los 8 años en este último, donde su padre era el secretario general del Ayuntamiento y su madre, maestra.
Otra de las tareas relacionadas con los comicios del 26-M sobre las que Génova prestará especial atención son las listas autonómicas. La nueva dirección nacional quiere ejercer todas sus atribuciones en este sentido y piensa llevar un estrecho control de las candidaturas que les envíen desde las organizaciones territoriales, con lo que se arriesgan a provocar tensiones con los barones regionales.
En el PP confían en retener los gobiernos de la Región y el Ayuntamiento de Murcia y en recuperar Cartagena, y también poseen favorables expectativas en las ciudades de Madrid y Valencia, y en las comunidades Valenciana y de Castilla-La Mancha. Fuentes de la dirección del partido creen que el desencanto hacia el PSOE que reflejaron las elecciones andaluzas de principios de diciembre se reproducirá en otras regiones donde los socialistas gobiernan, y alguno de los dirigentes territoriales del puño y la rosa lo temen.
Es más, en el PP están convencidos de que el presidente valenciano, Ximo Puig, anunciará el lunes el adelanto de las elecciones en su comunidad para hacerlas coincidir con las generales del 28 de abril, algo que aplauden los populares, porque lo interpretan como un signo de debilidad del PSPV-PSOE y se creen con ventaja en este nuevo escenario, pero que, en cambio, rechazan en Compromís y Podemos, los socios de Gobierno de Puig.
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