Edificio tomado en San José de la Vega

Uno de los ejemplos del mercadeo de 'casas okupas' está en la pedanía murciana de San José de la Vega, con cuatro pisos okupados a través de un intermediario. El edificio estaba terminado hace 10 años, pero la entidad financiera cayó y fue absorbida por un banco. Todo se paró sin cédula de habitabilidad. Los propietarios recuperaron la entrada, pero tres casas eran una herencia y sus dueños no han podido habitarlas, venderlas ni alquilarlas. «A finales de agosto nos llamó una vecina. Había visto dos furgonetas y a personas descargando enseres. Entendimos que teníamos okupas», relata el propietario.

Entraron en cuatro viviendas, tres del banco y una de un particular. «Fuimos a hablar con la pareja que okupaba nuestra casa. Una chica joven nos abrió, pero cuando le dijimos que éramos los propietarios se sorprendió. Pensaba que los pisos eran del banco; eso fue lo que le dijo quien les facilitó la entrada, previo pago de 400 euros», explica el afectado.

«Es un negocio en toda regla», dicen los vecinos. Pero estos propietarios han tenido suerte. Después de hablar varias veces con la pareja, la semana pasada se trasladaron al ático del mismo bloque, del banco. Saben que la entidad tardará más en reclamar su desalojo y el proceso hasta que les desahucien es muy largo.