Doce meses sin carné y 480 euros de multa por conducir ebrio y tras tomar 'coca' y cannabis
Es la primera sentencia después de la orden de la Fiscalía a las policías locales para que le remitan los atestados sobre drogas
Un año de privación del permiso de conducir y una multa de 480 euros es la condena que ha recibido un joven de Murcia, que fue sorprendido por la Policía Local cuando circulaba por la localidad de Sangonera la Verde por dirección prohibida y que dio positivo a los test de alcohol y drogas. La sentencia, dictada por el Juzgado de lo Penal número 5 de Murcia, es la primera que se produce después de la orden cursada por la Fiscalía Superior de la Región a las policías locales, con el fin de que remitan todos los atestados en los que un conductor pueda ir influenciado por sustancias estupefacientes.
Los hechos ahora sentenciados se produjeron en la tarde del pasado 8 de septiembre, cuando el joven, que padece esquizofrenia, circulaba con su turismo en sentido contrario por una calle de la pedanía murciana y se topó con una patrulla policial. En el test de alcohol arrojó una tasa de 0,38 miligramos de alcohol por litro de aire espirado y, además, dio positivo a cocaína y cannabis, lo que más tarde se confirmó por un análisis de laboratorio.
Una alteración mental
El conductor circulaba por una calle de Sangonera la Verde en dirección contraria y se topó con una patrulla
La Policía Local remitió el informe al juzgado y el viernes pasado se celebró un juicio rápido, que se cerró por conformidad con la condena señalada. El infractor se benefició de la aplicación de la atenuante analógica simple de alteración mental en virtud de la esquizofrenia que sufre, según recoge la sentencia.
Con la orden emitida la semana pasada a las policías locales de la Región, la Fiscalía trata de evitar que alrededor de un millar de conductores que todos los años son sorprendidos bajo los efectos de las drogas se queden sin un castigo penal, ya que hasta ahora la inmensa mayoría de los casos eran objeto solamente de una sanción administrativa.
Durante el año pasado, los test practicados por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil cazaron a 1.052 conductores bajo los efectos de las drogas, pero solo cinco de esos positivos acabaron en un juzgado porque provocaron accidentes con víctimas mortales y heridos graves. Los casos restantes se solventaron por la vía administrativa.
