El UCAM, fe y gloria en Valdebebas
Los universitarios siempre fueron fieles a su idea, pese a las críticas de un sector de la afición, y conquistan un merecido ascenso a Segunda ante el filial del Madrid
LA VERDAD/EFE
Martes, 31 de mayo 2016, 02:06
El UCAM abrazó anoche el sueño del ascenso. Ya pisa en Segunda y por méritos propios. El equipo de Salmerón, que vivió sus horas más bajas tras perder en casa en la primera vuelta contra el Murcia, nunca se descompuso, siempre tuvo fe en sus ideas, pese a algunos disconformes en la vieja Condomina, que silbaron su juego en determinados momentos, y se mantuvo al pie del cañón, esperando su oportunidad. Luego llegaron el triunfo en la Nueva Condomina y el ascenso al liderato, que arrebató al Real Murcia, su vecino, que ahora mira cómo el UCAM ha logrado lo que él tanto ansiaba. Anoche, en Valdebebas, el UCAM Murcia cumplió su sueño: ya es equipo de Segunda por vez primera en su historia.
Es la primera vez que los murcianos dan el salto a la categoría de plata y lo hicieron además en un campo volcado con el filial madridista, que albergaba la esperanza de remontar el 2-1 de la ida para retornar a la división superior dos temporadas después.
El estadio Alfredo di Stéfano presentó una magnífica entrada y ya desde los prolegómenos se vivía ambiente de fiesta en las inmediaciones, con muchos de los 5.270 espectadores llegando con bastante antelación directamente desde su puesto de trabajo.
Tampoco quisieron perdérselo rostros relevantes del madridismo como Florentino Pérez, Emilio Butragueño, Roberto Carlos y el técnico del primer equipo, Zinedine Zidane.
Comenzaron dominando los locales, pero pronto sufrieron un doloroso revés cuando Iván Aguilar controló un esférico dentro del área y definió de volea para batir a Abad poniendo en ventaja a los de Salmerón, que lo tenían todo a favor, pues solo tenían que aguantar con lo que mejor saben hacer: una defensa de hierro. Por algo, el UCAM ha sido el equipo menos goleado del curso.
Ese tanto tranquilizó a los murcianos, que comenzaron a encontrarse cómodos ante un Castilla que tenía fluidez, pero no encontraba los espacios para crear peligro. Así las cosas solo consiguieron firmar dos ocasiones. Primero un golpeo de Mayoral que obligó al despeje de Biel Ribas y, como consecuencia del córner posterior, un tiro de Llorente que se fue por encima del larguero.
Tras el descanso, salió más voluntarioso el filial blanco y vio recompensadas sus buenas intenciones con el primero de los tantos de Mariano. El punta remató de cabeza un centro puesto desde la derecha y levantó a la grada.
Duró poco sin embargo la alegría, ya que apenas cinco minutos después el UCAM trenzó una gran combinación por la banda derecha que llegó a las botas de Tekio. Asistió este y empujó el esférico bajo el larguero Pallarés. Pese a tener todo cuesta arriba, el segundo equipo merengue no bajó los brazos y siguió plantando batalla. Mariano marcó de nuevo, esta vez en un libre directo, y dio vida a los suyos en el tramo final del choque.
No fue suficiente y la tarde terminó con el triunfador celebrándolo junto a los aficionados del equipo que se habían desplazado hasta la capital de España.
El UCAM ya es de Segunda, y lo es pese a la campaña orquestada en Madrid tras el encuentro de ida, cuando los jugadores blancos y medios afines criticaron con dureza al equipo de Salmerón, al que acusaron de ser muy violento. Aunque había ciertas reticencias en el UCAM sobre cómo influiría esa campaña en el árbitro, el colegiado tuvo una gran actuación y no influyó en ningún momento en el resultado. Al final, el equipo de Salmerón, que hace solo unos días renovaba una temporada como premio y motivación, al mismo tiempo, pone los dos pies en Segunda.
Los interrogantes
Ahora se abren varias incógnitas sobre el estadio, ya que la vieja Condomina tendrá que ser renovada para albergar fútbol profesional, o cómo responderá la afición, bastante escasa durante casi toda la temporada, aunque sí ha demostrado estar al lado del equipo en este 'playoff'.