Ruina en los parrales que arrasó el temporal

El perjuicio por el pedrisco caído la pasada semana es mayor de lo que se estimó inicialmente, afectando a un total de diez localidades de la Región. Las zonas dañadas por las tormentas de granizo de las últimas semanas se sitúan en los términos municipales de Jumilla, Lorca, Aledo, Alhama de Murcia, Librilla, Totana, Bullas, Cehegín, Moratalla y Cieza, y en conjunto supone que se alcanzarán un total de 3.570 hectáreas dañadas y 9.067 toneladas de fruta perdida.

«Los daños en los cultivos ascienden a 6.907.353 euros, y se han utilizado para su valoración precios y producciones medias de las tres últimas campañas agrícolas», especificó ayer el consejero de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Miguel Ángel del Amor, tras conocer los últimos datos actualizados.

En el reparto concreto por territorios, en Jumilla han resultado afectados olivos, almendros y viñedos, todos ellos tanto de secano como de regadío, en un total de 850 hectáreas, y el valor de los daños es de 1.166.980 euros. En Lorca resultaron perjudicados almendros y olivos de regadío y naranjos en una superficie de 285 hectáreas, lo que supone 512.713 euros en pérdidas.

Limonero, naranjo, melocotonero, nectarino y parral son los más afectados en Alhama de Murcia, en una superficie de 115 hectáreas y el valor de los daños es de 1.001.671 euros; mientras que en Librilla han resultado dañadas 115 hectáreas de naranjos, por valor de 672.934 euros, y en Aledo 70 hectáreas de parral por valor de 960.777 euros.

En la comarca del Noroeste, en Bullas son varios los cultivos perjudicados: albaricoquero y almendro, ambos de regadío y de secano; ciruelo, melocotonero, nectarino, así como olivo y viñedo de regadío y secano, que representan exactamente 266 hectáreas y pérdidas por valor de 410.126 euros.

Particularmente, en Cehegín, ciruelo, melocotonero, nectarino, así como viñedo y almendro de regadío y de secano son las especies afectadas, distribuidas en 439 hectáreas y con unas pérdidas de 748.493 euros. En Moratalla, almendro y olivo de regadío y secano y viñedo de secano son las variedades que han sufrido daños, que se expanden en 525 hectáreas y el valor de los daños asciende a 352.841 euros.

Por su parte, en Cieza, caqui, ciruelo y melocotonero son los que han sufrido los efectos de las precipitaciones, se distribuyen en 905 hectáreas y el valor de las pérdidas es de 961.817 euros.

Los agricultores de las zonas afectadas por las tormentas de granizo de las últimas semanas tendrán a su disposición también unos 1.556 kilos de producto destinado para la cicatrización de las heridas del arbolado y de los cultivos dañados por dichas precipitaciones.

El consejero de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca visitó ayer una finca de uva de mesa en Aledo, donde las inclemencias meteorológicas causaron el derribo de sus parrales. En esta zona, de un total de 429 hectáreas cultivadas, 70 se han visto afectadas, causando un daño que se cifra en un coste económico de unos 960.777 euros.

Desde la Consejería se repartirá entre los ayuntamientos de los municipios afectados un fungicida que favorece el cierre de las heridas y evitará así la pudrición de la parte leñosa del cultivo, «para su uso a pie de parcela», explicó el consejero. Y es que el nuevo incremento de las temperaturas conlleva un riesgo de podredumbre en diferentes cultivos, como la propia uva de mesa, indican desde la Comunidad.