Las nuevas reglas del Trasvase pasan el filtro del Consejo Nacional del Agua, pero con menos apoyos
En una segunda votación, y con un margen más estrecho, el organismo consultivo apoya al Ministerio para redistribuir los aportes al Levante
Aunque con menos apoyos que en la primera votación, los miembros del Consejo Nacional del Agua dan de nuevo su respaldo al Ministerio para la Transición Ecológica para que modifique las reglas de explotación del Trasvase Tajo-Segura. La medida se había sometido a una segunda vuelta para recoger las opiniones de este organismo consultivo, en el que siempre suele tener mayoría el Gobierno central debido a la composición de sus miembros. En esta ocasión, se han emitido 81 votos, de los cuales 43 apoyan al Ministerio, mientras que hay 19 en contra y otros 19 en blanco.
El margen de apoyo es menor que en la primera consulta que hizo en marzo la Dirección General del Agua del Ministerio: votaron 78 miembros, de los que 45 apoyaron la propuesta, 15 votaron en contra y hubo otros 18 en blanco. De esta forma, aumentan las opiniones en contra y se reducen las favorables.
La Confederación Hidrográfica del Segura votó a favor del Ministerio, como el resto de demarcaciones. Cinco comunidades autónomas han cambiado el sentido de su voto: Cantabria y Extremadura han apoyado al Ministerio; mientras que Madrid y Castilla y León se han opuesto, y Galicia lo ha dejado en blanco. Por su parte, el director del Cedex, el centro de estudios que ha diseñado el cambio de las reglas, no ha votado en la segunda ronda.
Los gobiernos de Murcia, Comunidad Valenciana y Andalucía esperaban que se produjeran cambios respecto a la primera consulta, para intentar que el Ministerio reflexione a la hora de aplicar los cambios. Consideran que es innecesario acometerlos ahora, y proponen esperar al nuevo Plan de Cuenca del Tajo.
Cinco comunidades varían sus votos a favor y en contra, y el director del Cedex no se pronuncia
El cambio principal de las reglas consiste en reducir de 38 a 27 los hectómetros cúbicos trasvasables mensualmente cuando las reservas de la cabecera del Tajo se encuentran en el Nivel 2 de normalidad hidrológica. Esto permite redistribuir de otra las transferencias a lo largo del año para evitar los periodos de excepcionalidad hídrica (Nivel 3) o los 'trasvases cero'. La revisión de las reglas está prevista en el ley del Memorándum. El Ministerio prevé aplicar las nuevas reglas lo antes posible, a través de un real decreto.
«Deseos de García -Page»
El presidente del Sindicato de Regantes del Trasvase, Lucas Jiménez, manifestó que el resultado de la segunda consulta «es un 'dejá vù'». Expresó su preocupación por lo que viene a continuación, que son los caudales ecológicos del Tajo, ya que un incremento afectaría negativamente al Trasvase, sobre todo al regadío del Levante. «Castilla-La Mancha es una apisonadora. Les darán políticamente los caudales que tengan pactados y aquí paz y después gloria», señaló. «Ahora a por los caudales. Sin justificación técnica, 80 hectómetros cúbicos o más bajarán aguas abajo para satisfacer los deseos de supremacía de García-Page y resto de líderes de Castilla-La Mancha. Y esto sí que es un zarpazo de muerte al Trasvase. Ya lo dice hasta la propia Confederación Hidrográfica del Segura, con valentía por cierto».
Lucas Jiménez alaba «la valentía» de la CHS por decir que los caudales ecológicos le darán un «zarpazo de muerte» al Trasvase
Lucas Jiménez recalcó que no se trata de un problema medioambiental, ni de una cuestión técnica. «Es todo un compromiso político de una vicepresidenta Teresa Ribera para con una parte de los actores implicados en sus nefastas políticas hidrológicas».
El consejero Antonio Luengo lamentó el voto de la CHS, «poniéndose en contra de los intereses de la Región y dando la espalda a los regantes. Tenemos al enemigo en casa».
