Tres encapuchados asaltan la casa de una pareja de ancianos y le dan una paliza al marido
Los delincuentes entraron en la vivienda de madrugada y se apropiaron de joyas y dinero, tras ponerle una navaja en el cuello a la mujer
JESÚS YELO
Martes, 16 de agosto 2016, 00:50
Un matrimonio de octogenarios de Ricote se llevó el susto de su vida cuando ambos se encontraron de madrugada, mientras dormían, a tres encapuchados en su vivienda con la intención de robarles. Los hechos ocurrieron a la una y media de la madrugada del domingo. Los delincuentes penetraron en la casa de M.E.G, de 81 años, y de M.G.C, de 85 años -sin hijos-, situada en la calle San José, casi en pleno centro urbano y a escasos treinta metros del cuartelillo de la Policía Local. Los asaltantes accedieron a la vivienda por la parte lateral que da al tejado y de ahí al patio que conecta con el interior de la casa, una de cuyas puertas dejó el matrimonio abierta, como siempre, para que corriera el aire.
«Fue la mujer quien se percató al oír un ruido, mientras que su marido pensó que ella se había caído de la cama», relató ayer su sobrino Pepe Guillamón, desde el hospital Virgen de la Arrixaca, donde se encuentra ingresado su tío, a quien acompaña en estos difíciles momentos.
Dos de los encapuchados pusieron una navaja en el cuello a la anciana, mientras que el marido recibió múltiples golpes en la cabeza, el cuello y la cara. Después, los maniataron. Entre tanto, un tercer individuo se encargó de apoderarse de joyas, los relojes que portaba el matrimonio y una colección de monedas, entre otros objetos de valor, además de destrozar varios muebles de la casa. El sobrino del matrimonio no supo calcular el valor de lo robado, pero «fue cuantioso, ya que mi tío tenía muchos detalles con ella», recalcó a 'La Verdad'.
Nada más huir del lugar de los hechos, sobre las dos de la madrugada, el anciano salió a la calle a pedir socorro. «Iba en calzoncillos, amordazado con cinta americana y los tobillos con bridas negras y con la cara hinchada», contó uno de sus vecinos, que, junto a su mujer y un cuñado, vistieron al hombre y, en compañía de otro vecino, fueron los que llamaron a la Guardia Civil y a la ambulancia. El hombre fue trasladado a La Arrixaca, donde se recupera de las lesiones sufridas. Mientras, ella, que es diabética, acudió ayer al hospital Morales Meseguer, víctima de una fatiga angustiosa.
300 euros de una caja fuerte
Esta Redacción pudo hablar por teléfono, ayer a mediodía, con el hombre, que reconoció que se encuentra «mal, me duele la cabeza y la cara, y apenas puedo comer». En su relato de lo sucedido, señaló cómo oyó decir a su mujer «¡Ay!», tras el golpe que sufrió. «En ese momento me levanté de la cama y recibí sendos golpes en la cara y en la cabeza». Además, manifestó que «también se llevaron de la casa una pequeña caja fuerte que contenía más de 300 euros, cartillas médicas y algunas fotografías».
El matrimonio, natural de Ricote y muy conocido en el pueblo, emigró hace décadas a Barcelona, donde él trabajaba en una imprenta, pero regresó hace unos veinte años. De ellos cuida una mujer magrebí que hace 15 días tomó vacaciones y se marchó a su país. La Guardia Civil se ha encargado de la investigación del suceso. Los vecinos de Ricote están muy preocupados por lo ocurrido.