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El regidor convoca un referéndum sobre la eliminación de los toros en las fiestas

La consulta ciudadana someterá a votación la declaración de municipio libre de maltrato animal y la retirada de ayudas a los espectáculos taurinos

Jorge García Badía

Miércoles, 6 de abril 2016, 01:17

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La 'faena política' se antoja polémica para la alcaldía de Fortuna, que está organizando un referéndum para que los vecinos decidan sobre el futuro de dos cuestiones. La primera, la propuesta de declarar el municipio libre de maltrato animal, lo que llevaría aparejada la supresión de la tradicional suelta de vaquillas y las corridas de toros que desde hace décadas se celebran en las fiestas de San Roque. La segunda pregunta versará sobre la posibilidad de retirar las ayudas del Ayuntamiento a los espectáculos taurinos.

El plebiscito fue propuesto por el alcalde socialista, José Enrique Gil, con carácter previo a la moción que iba a defender Izquierda Unida en el Pleno del pasado jueves. La iniciativa de IU buscaba aprobar las mismas preguntas que se someterán a consulta ciudadana, además de emplear el dinero de las ayudas municipales a la promoción de la cultura y festejos basados en el respeto. A la sesión acudieron miembros de la Asociación de Animalistas de Fortuna, que recogieron más de 900 firmas a favor de la moción, y defensores de la fiesta, como el matador de toros fortunero Juan Belda.

La iniciativa no se debatió porque el regidor propuso celebrar antes la consulta ciudadana. Para ello, tuvo que hacer uso de su voto de calidad, porque el PP (6) votó en contra, IU se abstuvo (2) y solo PSOE (5) y Ciudadanos (1) votaron a favor. El referéndum ya ha levantado ampollas entre los populares. Su portavoz, Catalina Herrero, critica que «las fiestas no se conciben sin la suelta de vaquillas. No damos crédito. En una democracia se respetan los gustos de todos».

Herrero recuerda que «en el pueblo hay muchas familias que se dedican a la suelta de vaquillas y al montaje de plazas de toros». Los populares presentaron ayer un escrito exigiendo al alcalde que detalle cómo organizará el referéndum. «Queremos saber si costará algo a las arcas municipales».

El primer edil responde que todavía «estamos definiendo el modelo». No se ha definido dónde se ubicarán las urnas, si solo podrán votar mayores de edad o a partir de los 16 años y no se han redactado las preguntas tipo. Lo único que se sabe con seguridad es que se «organizará en mes y medio», antes de las fiestas previstas en agosto. «Será una convocatoria ágil».

El regidor aclara que el Ayuntamiento no tiene potestad «para prohibir los toros», pero reconoce que al votar la declaración de municipio libre de maltrato animal «no se podrían organizar» espectáculos taurinos. Gil quiere «consensuar» el contenido de la consulta y se reunirá con el matador de toros Juan Belda, la Asociación Animalista de Fortuna y los grupos políticos.

El socialista no cree que le pase factura política esta iniciativa porque «llevábamos las consultas ciudadanas en nuestro programa electoral; voy a darle voz al pueblo y cumplir con una promesa. Soy un alcalde al que le gusta preguntar». Con este tipo de políticas, Gil considera que los vecinos participan en la vida política, porque «pueden tomar decisiones», y ello contribuye a que «madure» el municipio y la Administración. Una vez se lleve a cabo el plebiscito, y teniendo en cuenta la opinión del pueblo, se volverá a llevar al Pleno la iniciativa de IU. Su portavoz, Salvador Alarcón, avanza que «el alcalde pretende que el resultado de la votación sea moralmente vinculante al debate posterior de la moción».

También defiende que IU «es respetuosa con la afición taurina, pero no es necesario que se emplee dinero público en esos espectáculos». El Ayuntamiento destinó en 2015 unos 18.000 euros para financiar el alquiler y la instalación de una plaza de toros portátil, la suelta de vaquillas y una corrida en las fiestas de San Roque. Alarcón concluye que «nos parece una cuestión a reflexionar, ese dinero se puede destinar a fines sociales». La última palabra la tendrá el respetable.

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