El Colegio de Enfermería, a las urnas tras años de escándalos

El órgano encargado de representar a la Enfermería murciana arrastra una historia poco edificante. Durante dos décadas estuvo en manos de una junta presidida por Diego Gutiérrez, destituido en 2011 al trascender alarmantes sospechas de corrupción. Más de diez años después, la Audiencia Provincial le ha condenado a dos años de prisión por apropiación indebida de los fondos de todos los colegiados.

La ahora candidata Amelia Corominas lideró en 2011 una plataforma que exigió al Consejo General de Enfermería de España (CGE) la limpieza del Colegio, con la convocatoria de elecciones. Fruto de estas denuncias se celebró el primer proceso electoral abierto y transparente en décadas. Con la bandera de la regeneración, Corominas se impuso a Pablo Fernández, el candidato apoyado por Satse. La situación parecía normalizarse en la institución, pero la calma duró poco. Las relaciones del Consejo General de Enfermería con Corominas y su equipo eran de abierta hostilidad. El Colegio murciano denunció por corrupción ante la Fiscalía al entonces todopoderoso presidente del CGE, Máximo González-Jurado, hoy defenestrado y enfrentado a una investigación en la Audiencia Provincial de Madrid por el supuesto saqueo de este organismo, con dudosas operaciones inmobiliarias y acusaciones de apropiación indebida, según ha revelado 'El Mundo'.

El duro enfrentamiento entre el CGE y el Colegio Oficial en la Región terminó con la destitución fulminante de Amelia Corominas en 2016, bajo el argumento de que había convocado las elecciones en las que buscaba su reelección con solo cuatro días hábiles para la presentación de candidaturas, al coincidir el proceso con la Semana Santa. El TSJ de Madrid avaló el cese al entender que Corominas no favoreció «ni el conocimiento de los colegiados ni la participación». La expresidenta, que siempre ha defendido que actuó con transparencia, denuncia que su destitución fue una operación del CGE para acallar su campaña contra la corrupción.

Corominas se resistió a su cese y presentó toda una batería de recursos que fueron rechazados por los tribunales. Finalmente, renunció en 2018. El próximo 8 de febrero se enfrentará a un juicio por desobediencia al CGE y presunta usurpación de funciones. El fiscal pide su inhabilitación, lo que significa que, si es condenada, tendrá que renunciar previsiblemente a la presidencia del Colegio, en caso de que este viernes gane las elecciones. Si se diese esta situación, la presidencia pasaría a su segunda en la candidatura, Sandra Navarro.

Estas circunstancias son resaltadas por Elena Ródenas, que se presenta como «libre de procedimientos judiciales». Para Corominas, esto es «juego sucio», y acusa a Ródenas de ser la «candidata de la junta de edad».

Desde 2018, la gestión del Colegio ha estado en manos de esta junta en principio provisional designada por el CGE. Su principal misión era convocar elecciones, pero ha tardado cuatro años en hacerlo. Algunos colegiados presentaron una queja al Defensor del Pueblo, quien pidió explicaciones y advirtió de que los estatutos de la organización colegial establecían «una obligación de ordenar la convocatoria de elecciones de manera inmediata».

Finalmente, las elecciones han llegado. Los colegiados están llamados a elegir entre dos candidaturas con perfiles muy diferentes. Corominas, enfermera en Correos, ha incluido en su lista a algunos de quienes le acompañaron durante su anterior etapa en el Colegio, como Enrique Mirabet, enfermero del trabajo que opta al cargo de secretario. Sandra Navarro, enfermera en Primaria, es la candidata a vicepresidenta. Entre sus vocales, Remedios Beltrán, coordinadora de Enfermería en el centro de salud de Archena, y Solanger Hernández, profesora de la UMU especializada en salud pública.

Por su parte, a Elena Ródenas le acompañan José María Martínez, supervisor de la UCI en el Reina Sofía (vicepresidente) y Leonor Zafra, directora de Enfermería de Viamed San José (secretaria). Frente al perfil a la izquierda de Amelia Corominas, que implicó al Colegio en la 'marea blanca', Elena Ródenas ha recibido el apoyo de cargos del PP, como los exdiputados regionales Juan Antonio Sánchez-Castañol y Javier Iniesta, actualmente directores de Enfermería del Santa Lucía y La Arrixaca, respectivamente. También cuenta con el respaldo de Carmelo Gómez, presidente de la Sociedad Murciana de Enfermería Geriátrica y profesor de la UCAM, entre otros.