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Patricia Guerao y su padre, Francisco, ayer, junto al enorme lienzo que fue pared de los baños árabes, en la calle San Antonio, en Murcia. edu botella
Recuperan los restos de los baños árabes de la calle San Antonio

Recuperan los restos de los baños árabes de la calle San Antonio

El estudio de arquitectura Guerao abrirá a los murcianos este destacado yacimiento como un espacio de creación

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Viernes, 21 de septiembre 2018, 03:04

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Hablar en Murcia de baños árabes traslada a muchos, al instante, a la calle Madre de Dios, donde los que allí se alzaban, pese a ser un monumento nacional protegido, fueron arrasados hace algunas décadas pues obstaculizaban la apertura de la Gran Vía. Pero, como resulta lógico, no eran los únicos baños de la ciudad. Casi tres décadas después de que fueran descubiertos, los de la calle San Antonio podrán ser disfrutados por todos los murcianos. El yacimiento fue excavado en 1985, cuando se hallaron las salas templada y caliente.

La sorpresa residió en descubrir que se conservaban los alzados completos, incluidas partes de las bóvedas. Más tarde, en 1999, durante la construcción de un edificio anexo, se descubrieron la sala de reposo y otras dependencias. El estudio de arquitectura Guerao ha decidido poner en valor esta última parte de aquellos históricos restos que hasta ahora permanecían ocultos en un bajo comercial.

La idea es convertirlo en un espacio público ideal para el 'coworking' -lugares de trabajo compartido-, la convocatoria de presentaciones o la realización de reuniones. Pero, además, el proyecto permitirá que todos puedan admirar los remotos muros desde la calle, tras la instalación en el edificio de grandes ventanales.

«Pondremos en valor este lugar para permitir que muchos admiren nuestro espléndido pasado», dice el promotor de la idea

«Es una forma de poner en valor los restos arqueológicos, colaborar en el impulso de este histórico barrio y que muchos puedan admirar nuestro espléndido pasado», señalaba ayer Francisco Guerao, responsable del estudio de arquitectura e impulsor de la iniciativa junto a su hija, Patricia Guerao.

Como en Santa Eulalia

Para él, por otro lado, no es nada nuevo poner en valor un yacimiento. Ya hace unos años realizó lo mismo en los bajos de un edificio de Santa Eulalia, donde conservó un tramo de muralla y parte de un cementerio. Para ello, adaptó los pilares y forjados para conservar el hallazgo, que el Ayuntamiento de Murcia se comprometió en su día a hacer visitable.

La sensibilidad del estudio de arquitectura permitió que se abrieran grandes huecos acristalados hacia la calle, lo que permite contemplar a cualquier hora del día el interior del yacimiento. Incluso dentro del vestíbulo colocaron un enorme cristal, técnica pionera en la ciudad.

Entre los restos recuperados se encuentra la barbacana y lienzos de muralla y antemuralla, una saetera y varios panteones funerarios. Entretanto, aprovechando las grúas de la propia obra, se procedió a reconstruir un tramo de la muralla de 10 metros de longitud, desde donde se habían desprendido algunos bloques que pesaban hasta 4.000 kilos. Todos los restos fueron conservados y puestos en valor. Algo similar realizarán ahora en la calle San Antonio.

La excavación arqueológica en esta zona fue realizada a finales del siglo pasado, como documentó en su día Francisco Muñoz López, sobre un yacimiento ya conocido pero que, en aquella ocasión, permitió descubrir restos de tiendas, edificios y un cementerio musulmán. La excavación se extendió hasta tres metros por debajo del actual nivel de la calle, lo que obligó a los constructores a respetar también un espacio de restos en el sótano del edificio.

El hallazgo más destacado de aquella campaña fue localizar otra parte de los baños árabes de esta calle, que ahora podrán ser disfrutados por los murcianos después de décadas ocultos en un bajo comercial cerrado. Entre las estructuras, por ejemplo, se conserva el hueco de la puerta de entrada, así como los arcos que conformaban las bóvedas y que han sido integradas en la nueva edificación.

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