«Necesito cambiar mi dirección en el empadronamiento»
Los usuarios siguen reclamando la atención presencial para realizar sus gestiones en lugar de hacer uso de la administración electrónica
20 de julio. Esa es la fecha de la cita previa que pudo conseguir ayer una vecina de Murcia, Tania, que necesita cambiar su dirección de empadronamiento. Lola, por su parte, tenía cita para ayer a las 13.30 (la había solicitado a mediados de junio), pero a esa hora estaban entrando los de las 13 horas. Mohamed esperaba con paciencia y con la esperanza de poder llevarse el papel que le iba a permitir solicitar el Ingreso Mínimo Vital (IMV).
Son solo tres ejemplos que se repiten prácticamente todos los días desde que el servicio de Estadística se abrió al público hace un mes y que cada día atiende a 350 personas. La situación se ha agravado desde que el Gobierno central aprobó las ayudas para el IMV, ya que uno de los requisitos es que los solicitantes demuestren que llevan viviendo más de un año en España, y no sirve un mero volante de empadronamiento, sino un certificado que, además de necesitar más tiempo de expedición, cuesta 6 euros.
«No tengo ordenador»
Aunque el Ayuntamiento está haciendo especial énfasis y realizando campañas para animar a los vecinos a utilizar la administración electrónica, lo cierto es que para la gran mayoría de los usuarios les resulta muy difícil su uso. «Yo no tengo ni ordenador, y eso de la firma digital, cómo se hace? No es para mí», comentó Fátima, una mujer marroquí que lleva más de diez años viviendo en España; a su lado, otro inmigrante asiente.
Lo cierto es que todos los que acuden a las puertas del servicio de Estadística, que tiene sede en la calle Puerta Nueva, se van a sus casas con la documentación que han ido a solicitar, a pesar de las colas y de las esperas. Y suele cumplirse la hora de cierre.