Marco Antonio Fernández Esteban: «Vamos a devolverle la plena autonomía a las pedanías, se acabó el tutelaje»

-De nuevo al frente de las 67 pedanías y Juntas de Distrito del municipio. ¿Dónde quiere poner el foco de su actuación en este nuevo mandato?

-Retomo la responsabilidad con una premisa clara, devolver el protagonismo, capacidad de decisión y autonomía a las juntas municipales de cada una de las pedanías y al órgano que las gestiona. En estos dos años de oposición y durante la campaña electoral, hemos abogado porque no se recortaran sus competencias. En este tiempo también constatamos, por lo que nos decían los ciudadanos, que los nuevos sistemas de tramitación de los proyectos puestos en marcha con el anterior equipo de gobierno socialista y de Ciudadanos no cumplía con sus cometidos. Eran eternos, por lo que nuestra prioridad es dotar de herramientas y de recursos humanos a las juntas municipales para que se atiendan ágil, eficaz y eficientemente estas demandas.

-¿Cómo lo va a articular?

-Con un sistema de contratación adaptado a cada Junta Municipal, que manejen directamente su presupuesto, y con un proceso administrativo sin tutelaje de la Concejalía correspondiente. Con el sistema vigente se ha mantenido dos y tres meses cerrado un cuarto de baño de un colegio porque un grifo goteaba. Es injustificable e inasumible. Queremos que en horas o pocos días se solucionen esas pequeñas obras o actuaciones que le llegan al pedáneo.

-¿Hablamos de un contrato único para estas obras menores?

-Serán unos contratos marco, cuyo borrador de pliegos ya tenemos muy adelantado y cuya ejecución recaerá en una sola empresa. El objetivo es que en septiembre salga a contratación y a principios de 2024 esté vigente. Con ello quitamos a las juntas municipales la carga burocrática y administrativa que ahora tienen. Ellos decidirán qué se hace y cuánto se quieren gastar en esa actuación. Desaparece el tutelaje del Ayuntamiento y vuelven a actuar como personas mayores de edad, porque lo que hacía el anterior ejecutivo se basaba en una desconfianza absoluta hacia los pedáneos. Ellos tendrán siempre un canal abierto para que accedan a todos los servicios del Ayuntamiento que se encargarán de la parte técnica, donde trabajan como administradores 15 funcionarios, a cada uno de los cuales le corresponden unas 4 o 5 pedanías.

-¿En qué se ha traducido esta desconfianza?

-Por ejemplo, en la reducción en un 70% del gasto en el mantenimiento de los colegios y en obras en la vía pública. De la partida de 500.000 euros que tenía la Concejalía de Fomento para obras, como el arreglo de baches, no se gastó ni un euro. No se inició ni un solo expediente. Nosotros, esta misma semana, hemos adjudicado el contrato para más de un centenar de microobras en colegios para que se acaben entre esta y la próxima. Y retomaremos varios proyectos que dejamos iniciados dentro del PEIP antes de la moción de censura, con su partida presupuestaria, y que han estado aparcados por cuestiones políticas más que técnicas. Por ejemplo, en Barqueros, El Esparragal, Casillas o Llano de Brujas.

-¿Qué otros cambios habrá este mandato en competencias, por ejemplo, de mantenimiento de edificios y la vía pública?

-Las hemos centralizado en mi Concejalía, salvo la de los edificios deportivos. No tenía sentido la dualidad de competencias y ahora se va a simplificar, también, todo el proceso. Y todo el mantenimiento de la vía pública, que no sea en el casco urbano, también lo asume Pedanías: las grandes vías las llevará mi concejalía y las internas de las localidades, las Juntas Municipales. Ahora estamos terminando los procesos de licitación de obras más grandes, como los asfaltados.

-Sigamos con la descentralización. ¿Se logrará actualizar este mandato, por fin, el reglamento de participación ciudadana, vigente desde 2005, tras dos intentos fallidos en 2016 y 2019?

-Es necesario y sí se va a hacer. En las pasadas dos legislaturas se formaron sendas comisiones de Pleno para la redacción del nuevo reglamento. No se consiguió en ninguno de los dos casos el consenso político necesario e, incluso, en la segunda, que presidió Ciudadanos, se produjo una ruptura importante entre PSOE y Cs. La formación naranja abogaba por la retirada de competencias directamente. En esta ocasión, el PP presidirá la comisión y entendemos que será más sencillo lograr el máximo consenso, porque con nosotros y el PSOE ya tenemos una amplísima mayoría. En este reglamento no hay cuestiones políticas, solo se trata de dotar a las pedanías de las herramientas de gestión necesarias para funcionar y actualizarlo con la legislación vigente. Creemos que con Vox, una vez entre en las juntas municipales, será posible el acuerdo.

-¿Para cuándo se prevé?

-Nuestro objetivo es aprobarlo por unanimidad y durante este mandato. Hay que tener en cuenta que estaba pensado para el bipartidismo; y, por ejemplo, tampoco contempla los macrocontratos de mantenimiento como el del alumbrado público o parques y jardines, que les correspondía antes a las Juntas Municipales. En Servicios Sociales también hay que delimitar competencias, así como en el desarrollo y dinamización del comercio de cercanía, algo que nos reclaman desde la pandemia.

-¿Se abrirá la participación en este proceso más allá de los grupos municipales?

-Sí, esto es importantísimo. La intención es que en la comisión participen también las juntas municipales, que son las que realmente conocen sus necesidades.

-Otra de sus competencias es el callejero público. ¿Se seguirá con el criterio de la paridad entre hombre y mujer a la hora de asignar el nombre de las calles que inició el PSOE?

-Aunque dependa de mi Concejalía, el nombramiento no lo hace el concejal de turno sino una Comisión de Pleno; pero está claro que no hay ningún inconveniente en mantener ese criterio. Lo que sí debo decir es que en estos dos años tras la moción de censura no se ha cambiado ni puesto ninguna placa en las calles; solo alguna de manera testimonial. Las partidas presupuestarias que había para ello, algunas bastante importantes, se pasaron a otros menesteres. Por ejemplo, el caso de las placas multicolor con códigos con tecnología NaviLens se quedó totalmente parado. Y necesitamos dotación presupuestaria.

-¿Ha calculado cuánto va a necesitar en 2024?

-Inicialmente, para hacer lo que no se ha ejecutado en estos dos años, unos 90.000 euros. Y estamos calculando lo que costaría retomar el proyecto NaviLens, que incorporaba mediante estas placas inteligentes la historia de las calles de la ciudad en diferentes formatos e idiomas. Entendemos que serían unos 200.000 euros anuales en este mandato.

-Pero se llegó a iniciar y hubo que hacer algunos cambios porque se colocaron en edificios BIC.

-Sí, hubo que cambiar algunas placas de ubicación. Pero solo se colocaron en el centro de la ciudad y la idea es llevarlas también a las pedanías.

-Al filo de las elecciones, la Junta de Gobierno de PSOE y Cs encargó a Urbamusa, con un presupuesto de 400.000 euros, el diagnóstico arqueológico y arquitectónico de las Fortalezas. ¿Qué recorrido tiene?

-Este encargo es consecuencia de esa subvención que la Comunidad Autónoma nos concedió en 2019. El objetivo es hacer un diagnóstico del estado de tres sitios (el recinto superior del Castillejo, la alberca del castillo de Larache y el Molino Armero) para redactar después un plan director con las actuaciones para su restauración. Viendo que podía perderse esta ayuda porque el anterior equipo de gobierno lo tenía paralizado, pedimos a los técnicos que propusieran alternativas para ponerlo en marcha. Y así se hizo. Los trabajos han comenzado a finales de junio: se está excavando, haciendo sondeos, limpiando (retirada de maleza y escombros), etc.

-¿Qué plazos se manejan?

-Quedan otras tres semanas de trabajo de campo y un mes más para la redacción de la documentación técnica para elaborar el plan director que defina las distintas fases de las obras para acondicionarlos. En noviembre tiene que estar presentada la justificación de la subvención a la Comunidad. En la alberca del Cabezo de Torres y en la de Larache es la primera vez que se realiza una campaña arqueológica, y en el Castillejo solo se trabajó en el recinto superior en 1923, aunque no queda documentación sobre esa excavación. En estos tres sitios hay trabajando un equipo de 24 personas, de las que 8 son arqueólogos y dos restauradores, la mayoría mujeres.

-Castillo de Monteagudo. ¿Para cuándo las visitas a la primera fase restaurada?

-Hemos retomado las conversaciones con el Ministerio de Cultura y esperamos haber firmado el convenio de acceso al Castillo a principios de 2024. Queremos también impulsar otros dos convenios, el del diagnóstico y restauración del Cristo y el que retome las dos fases restantes de restauración del Castillo. Sabemos que este último es el más complicado, al estar el Gobierno en funciones y no haber un marco presupuestario disponible, pero la petición está hecha y seguiremos insistiendo. Tampoco vamos a perder la oportunidad de presentar proyectos a los fondos europeos en las líneas que se convoquen o en los de los propios ministerios competentes.

-¿Tiene el PP previsto incrementar u ofrecer las visitas guiadas para que se conozca más la importancia de este patrimonio?

-Efectivamente, porque consideramos que estas Fortalezas, este sitio histórico, que sobre el plano ocupa más de 1,5 millones de metros cuadrados, es el gran desconocido. No descartamos que se convierta en una de las excursiones de día a las que se puedan apuntar, por ejemplo, los turistas que llegan en un crucero al puerto de Cartagena.