Ponce indulta su cuarto toro en La Condomina

El diestro Enrique Ponce indultó este domingo un excelente toro de la ganadería de Olga Jiménez en la primera corrida de la Feria Taurina, en la que cortó las dos orejas y rabo simbólicos a este astado y salió a hombros junto a El Fandi y José María Manzanares, que empataron a dos apéndices.

El toro indultado, el cuarto, al que el matador perdonó la vida en el coso de La Condomina, lleva el número 32, de nombre Filósofo, de pelo colorado y que arrojó en la báscula 530 kilos.

La plaza registró más de media entrada.

Se lidiaron toros de la ganadería de Hermanos García Jiménez, el quinto devuelto por cojo y sustituido por otro de El Pilar.

Las reses contribuyeron al lucimiento de las espadas, con excepción del segundo y el quinto bis, que han tenido poca clase.

Enrique Ponce, que no pudo conseguir faena en el primero de la tarde, que tuvo nobleza pero pocas fuerzas, realizó una faena para la historia en el toro del indulto, en el que las tandas de muletazos alternadas con las de naturales se sucedían con mucho temple, mientras que el astado acudía boyante a la muleta.

El torero de Chiva (Valencia) perdonaba así la vida al que hace el número cuatro en el coso de La Condomina desde que en 1992 indultó a Bienvenido, de la ganadería de Jandilla.

El granadino El Fandi no tuvo suerte con su lote, al que le faltó recorrido y transmisión, y se lució, como es habitual en él, en los tercios de banderillas y en dos soberbias estocadas volcándose sobre el morrillo.

El alicantino Manzanares no se entendió con el que ha hecho tercero, pero se desquitó en el que cerró la plaza, con el que se reencontró con su toreo templado y con muletazos interminables.

Su faena no tuvo la profundidad de otras tardes, pero sí interés por su disposición y forma de cuidar al toro para aprovechar al máximo su bravura y nobleza.