Fallos en el diseño retrasan el colector de lluvias para evitar inundaciones en el norte de Murcia

Murcia espera desde hace años, incluso décadas, una solución que parecía al alcance de la mano, sobre todo, tras la Dana de 2019. La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) había elaborado un proyecto el año anterior para la construcción de un colector o interceptor de aguas pluviales en la zona norte del municipio. La obra había sido declarada de interés general por el Estado, estaba presupuestada en 90 millones de euros y tenía aprobada la declaración de impacto ambiental, según recordó el alcalde murciano, José Ballesta.

En 2021, al Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex) le llegó el encargo de la Dirección General del Agua para el análisis del comportamiento hidráulico del interceptor, según explican fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica; un trabajo que sigue «en curso» y para el que no se dan plazos para su conclusión y posible inicio de las obras.

El proyecto constructivo fue promovido por la CHS, pero «dada la complejidad hidráulica del interceptor», durante la revisión de los primeros documentos, «se identificó la necesidad de realizar estudios hidráulicos complementarios», apuntan.

El colector tiene una longitud aproximada de 6.800 metros y a lo largo de su recorrido intercepta cinco ramblas, proyectándose una obra de incorporación de caudales para cada una de ellas. Son las de Churra, Pago del Obispo, del Cementerio, Espinardo y de la Bernala, donde confluye la canalización subterránea, y de ahí va al río.

El caudal oscila entre 31,7 m3/segundo al inicio y 118 m3/segundo en su conexión con el encauzamiento del río Segura (datos correspondientes a un periodo de retorno de 50 años).

Los técnicos del Cedex encontraron diversos fallos en varios tramos del colector durante la evacuación de los caudales y, sobre todo, «insuficiencia de capacidad en la confluencia con el encauzamiento» del Segura. En ajustar esos números están trabajando, así como en las estructuras de toma de las diferentes ramblas.

Igualmente, tratan de solucionar los problemas relacionados con esa insuficiente capacidad del colector con el diseño de una serie de estructuras de laminación a la entrada de las ramblas. Con ello se lograría reducir los caudales circulantes por el interceptor y también sus dimensiones iniciales, «garantizando en todo momento la seguridad hidráulica de la infraestructura», insisten desde el Cedex.

Desde Murcia, el alcalde de la séptima ciudad de España, José Ballesta, conminó este jueves al Estado a que ejecute las obras del colector de aguas pluviales de la zona norte del municipio, «que ya está redactado, licitado y en el que se han invertido 2 millones de euros».

Ballesta, que hizo un balance de las consecuencias que estos tres días de tormentas, especialmente este miércoles, tuvieron en el municipio, insistió en que el Estado «tiene que dotar de seguridad a Murcia, con casi medio millón de habitantes, porque no puede estar mirando al cielo con temor cada vez que se pone gris».

«Podemos llegar a acuerdos y que se haga por fases», dijo, si no se puede invertir de una vez esos 90 millones, pero no se puede esperar más, insistió el alcalde, porque «esta infraestructura resolvería las inundaciones de la zona norte», la más castigada en episodios tipo Dana.

Los datos avalan este argumento, ya que, según detalló, el episodio más intenso de precipitaciones se produjo entre las 16.50 y las 17.30 horas de ayer, periodo en el que en el centro de la ciudad se llegaron a recoger 53 litros por metro cuadrado, mientras que en el área norte, de la Nueva Condomina, esta cantidad llegó a los 74 litros por metro cuadrado. «Si lo comparamos con la Dana de 2019, entonces en una hora se recogieron unos 33 l/m2)», apuntó Ballesta.

El concejal de Planificación Urbanística, Antonio Navarro, insistió en que el interceptor de aguas pluviales de la zona norte «hubiera evitado el colapso, la inundación y el corte de vías y calles en esta parte del municipio». Y aunque comentó que el Cedex está actualmente «recalculando el caudal que derivado por este colector puede llegar al río Segura desde el Rincón de Beniscornia para regularlo en función de la lluvia, añadió que «no es de recibo que no sepamos nada en 2024 de un proyecto que se retomó tras la Dana de 2019».

Por otra parte, desde el Grupo Municipal Socialista, su portavoz, Ginés Ruiz, pidió al alcalde de Murcia «más seriedad a la hora de hacer el análisis de la gestión» de los episodios de lluvia y que «ponga remedio urgente al urbanismo descontrolado, la limpieza periódica de imbornales, y el caos generado por la nefasta gestión del PP en el Ayuntamiento durante 30 años, que ha dejado un municipio tremendamente vulnerable».

Insistió en que fue el PP «el que urbanizó ocupando zonas inundables y sin construir las infraestructuras necesarias, y ahora quiere cargar el problema a otro». El portavoz socialista añadió que «es evidente que toda infraestructura ayuda, y ésta es necesaria, pero cuando uno pretende que sea el Estado el que le resuelva los problemas que ha creado con su ineptitud, lo mínimo que puede hacer es pedirlo con algo de humildad y haciendo autocrítica» y no solo «culpando al Gobierno de España».