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Cartelería modernista de principios del siglo pasado para anunciar la Semana Santa de Murcia
La periodista Tati García asume la responsabilidad de pregonar, el próximo 18 de febrero, «la mayor historia de amor jamás contada», la de la Pasión
Nuevos tiempos, nuevas propuestas para representar la fe, la tradición y la devoción. Esa es la sensación que transmite el cartel anunciador de la Semana Santa de 2024 en Murcia, que se aparta del estilo sobrio de este tipo de propuestas para transmitir modernidad, paradójicamente, desde una estética que ya podríamos considerar como clásica: la del movimiento modernista de finales del siglo XIX y principios del XX. Así, al estilo de la elegante cartelería comercial y publicitaria de principios del siglo pasado, el autor de la propuesta, el joven pintor murciano Santiago Rodríguez López (Archena, 1988) plasma en 'Respice Stellam Voca Mariam' una alegoría de la de la figura la Virgen, como faro y estrella que sirve de guía a los fieles en su travesía por la vida, y que el ángel anunciador sostiene a modo de relieve. Confiesa el autor que tiene el querubín un rostro prestado y este sábado, durante el acto de presentación de su trabajo, agradeció a Lola, su modelo, la paciencia mostrada para facilitar la ejecución del retrato.
Era este año la cofradía Servitas la encargada de elaborar el cartel anunciador y es por ello la Santísima Virgen de las Angustias de Francisco Salzillo, que la hermandad saca en procesión cada Viernes Santo, la que protagoniza una obra que Rodríguez López calificó como «una de las más importantes de mi carrera». Es esta puesta de largo la que, aún con la Cuaresma por llegar, lanza prácticamente los actos de la Semana Pasión de este año. Para ello se reunieron este sábado, en la iglesia de San Lorenzo de Murcia, los principales representantes de la familia cofrade de la capital, entre los que se contaba como invitada la pregonera de este año, la periodista murciana Tati García, cuarta mujer que asume este honor en la ciudad, rompiendo la tendencia de los últimos años y tomando el testigo que le dejó en 2018 otra representante del mundo de la comunicación, Encarna Talavera, la Doña Sardina de este año.
«Ante esta responsabilidad que asumí hace unos meses con mi elección para pregonar la mayor historia de amor jamás contada, he profundizado en dos direcciones; por un lado, la de la tradición, las imágenes, el fervor, el trabajo y el sacrificio que tiene detrás la Semana Santa de Murcia y, por otro, he hecho acopio de sentimientos y del sentido que quería darle a mi intervención, como sendero para cumplir con este difícil reto personal», señalaba la periodista, destacando que los que están a su lado «han sido un revulsivo para ahondar en el misterio de la pasión, la muerte y la resurrección de Cristo». «Soy vuestra y nos vemos dentro de unos días -el próximo 18 de febrero- en el Teatro Romea», agradeció la comunicadora, que quiso invitar a compartir espacio, durante su intervención de este sábado, con Clara Yepes (Murcia, 2010), alumna del Colegio Jesuitinas y que ha sido elegida en esta ocasión pregonera infantil de la Procesión del Ángel.
«Gracias a mis padres por enseñarme a participar en la Semana Santa», señaló la joven desde el atril, ejerciendo como reflejo del futuro de una celebración que en Murcia se transmite de generación en generación. Así, desde un sentimiento similar, pero cultivado a lo largo de las décadas, también agradeció Domingo José Garriga (Murcia, 1957) a sus progenitores -y en especial a su madre, para la que pidió un aplauso- su entrada en la familia cofrade. Y lo hizo, este empresario nacido en la calle San Carlos, como Nazareno del Año. «Reconozco que me encuentro nervioso», señaló este miembro de la Cofradía del Refugio, a la que llegó «tras nacer pegado a Sánchez-Parra padre», pero a la que no cerró su vinculación pasional, ya que también ha desfilado con el Amparo y la Salud. «Espero estar a la altura de los anteriores», concluyó.
«Es un hombre de labor callada, por la que recibe un reconocimiento que le premia», señaló en relación a Domingo José Carmen Conesa, consejera de Cultura, Turismo, Juventud y Deportes del Gobierno regional, que agradeció durante el acto la labor de toda la familia cofrade para «engrandecer la celebración, sacar las procesiones a la calle, enriquecer el patrimonio y cargar con el peso de la Pasión con el gesto de vestir la túnica». «Todos suman y trabajan para entregarlo en las mejores condiciones a las nuevas generaciones», señaló, destacando, asimismo, la importancia que desde el punto de vista turístico tiene esta celebración, declarada de Interés Turístico Internacional, en la Región y el municipio.
«Tenéis el desafío de anunciar que la pasión, muerte y resurrección de Cristo también sucede en Murcia y que los murcianos la vivimos con la generosidad y cercanía que nos caracteriza», apostilló el concejal de Cultura e Identidad Diego Avilés. «Disfrutar del próximo inicio de la Cuaresma; comienza la pasión», concluyó el presidente del Cabildo Superior de Cofradías, José Ignacio Sánchez Ballesta.