Un atraco en un banco y un 'sinpa' en un bar de Monteagudo

Al ladrón, no le importó la demora de su atraco, ni tan siquiera, el hecho de que estuviera asaltando la entidad a cara descubierta, con un gorro blanco como único elemento para disimular su rostro ante las cámaras de videovigilancia. Pasado ese tiempo, cogió su botín y se esfumó. Ese fue el final de un robo cometido a las 10.30 horas del pasado martes en la sucursal de Cajamar de la pedanía murciana de Monteagudo. Agentes de la Guardia Civil, que han iniciado una investigación para localizar al ladrón, rescataron una imagen del atracador para enseñársela a los vecinos y alguno lo reconociera. Clientes de un bar aseguran que, antes de esa hora, el hombre se tomó dos cafés en un bar cercano «que no llegó a pagar», explicó la dueña.

Estuvo varios minutos sentado frente a la puerta de la oficina bancaria. «Dijo que estaba esperando a su mujer que estaba en el supermercado comprando, pero ese tío no era de aquí. Estaba vigilando quién entraba y salía de la oficina», indicó un testigo.

El hombre, de mediana edad, con barba blanca y corpulento, esperó el momento adecuado y entró a la caja. Encañonó a las cajeras, y exigió que abrieran la caja fuerte, algo que una empleada hizo. Tras la mencionada tensa espera, a los diez minutos, la caja se abrió, cogió una cantidad indeterminada de dinero y huyó del lugar.