Más de 3.300 actuaciones en lo que va de año ponen a punto los 520 cruces semafóricos de Murcia
La revisión y el repintado en Gran Vía, San Antón y Ronda Norte se realizan durante este mes para minimizar los problemas de tráfico
Cortar un carril de circulación en vías tan céntricas como Ronda Norte, San Antón o Gran Vía para realizar trabajos de mantenimiento en los semáforos puede ocasionar excesivos problemas de tráfico. Por eso, en agosto, aprovechando que hay menos circulación es cuando se llevan a cabo trabajos de limpieza de cada una de las partes de las instalación –cabeza, unidades ópticas, visera, soportes y armarios– y repintado de báculos y bases.
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«Con estos trabajos –explicó ayer la concejal de Movilidad Sostenible, Rebeca Pérez, a pie de los semáforos de Ronda Norte– finalizamos una ronda de actuaciones preventivas, es decir, habríamos dado una batida a las instalaciones de la ciudad y pedanías y comenzaríamos otra nueva con el objetivo de minimizar los trabajos correctivos». En lo que va de año, entre enero y el 31 de julio, se han realizado 3.355 actuaciones.
De interés
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Actuaciones en los últimos cinco años. 7.857 (año 2016); 8.146 (2017); 8.043 (2018); 6.742 (2019); 3.355 (hasta el 31 de julio).
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Tipo de averías. Suponen el 70% de las intervenciones (semáforos apagados, lámparas fundidas, campanas que no suenan, pulsadores que no funcionan, etc).
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Otras incidencias. El 30% de los trabajos de Murtrafic obedecen a las reparaciones por actuaciones incívicas y actos vandálicos, limpieza por colocación de carteles o pintadas o daños por accidentes en la vía pública.
La empresa que lleva a cabo los trabajos es Murtrafic, concesionaria de mantenimiento. A diario se encarga de las reparaciones que sean necesarias ante cualquier daño –actos vandálicos, destrozos por colisión de vehículos– o avería. Pero, además, lleva a cabo un trabajo continuo, a lo largo de todo el año, para el repintado y limpieza de cada una de las partes de la instalación: cabeza, unidades ópticas, visera, soportes y armarios, con el fin de prevenir su deterioro.
Junto a María Dolores Martínez, presidenta vecinal del distrito Norte –El Ranero, San Basilio, San Antón y San Andrés– , la responsable de Movilidad Sostenible, Rebeca Pérez, explicó las características del plan que se está llevando a cabo, de forma que las regulaciones semafóricas «presten su servicio de forma eficiente, ágil y segura».
De las 520 intersecciones semafóricas en la ciudad y pedanías, un 40% cuenta con dispositivos inteligentes y se encuentran centralizadas en la sala de control de tráfico, de manera que se pueden regular los tiempos ante distintas situaciones derivadas de los flujos de tráfico, o factores como la contaminación ambiental, un accidente de tráfico o eventos en la ciudad, desde una manifestación a un desfile. De la misma forma, y a consecuencia de la crisis de la Covid-19, también se han regulado los tiempos alargándolos para el peatón a fin de garantizar el cruce a la distancia de seguridad recomendada.
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Actos vandálicos, pintadas en la columna y accidentes de tráfico provocan el 30% de las reparaciones
Un 70% de las averías que se tramitan y realizan por parte del servicio de tráfico de forma ordinaria obedecen a averías relacionadas con apagones de luz, luces fundidas, pulsadores que no funcionan o los avisadores acústicos que dejan de emitir señal y el 30% restante responde a otras incidencias, tales como actuaciones incívicas, actos vandálicos, colocación de carteles, pintadas o accidentes en la vía pública.
Sistema de alarma
Las actuaciones en caso de averías se realizan de manera inmediata. Pueden ser demandadas por el propio sistema de alarma, avisos del servicio o de la Policía Local, juntas municipales y de distrito y particulares.
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«De manera correctiva, –señala Rebeca Pérez–, el Ayuntamiento ha realizado hasta el 31 de julio 3.355 actuaciones y tenemos muy claro que hay que seguir con todo un plan de mantenimiento y conservación de estas infraestructuras tan necesarias y, por tanto, activamos este operativo que contempla sobre todo el control de todos los elementos que conforman un semáforo, –báculo, cabeceras, unidades ópticas, lentes, pulsadores y los armaricos de control de tráfico– para estar siempre a pleno rendimiento y para minimizar la actuaciones en materia correctiva».
Otra de las actuaciones es la sustitución de las antiguas lámparas incandescentes de vapor de sodio por tecnología led para la señalización luminosa, «ya que tienen una vida estimada 50 veces superior y, por tanto, generan importantes ahorros de energía».
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