Los vecinos de La Palma exigen poner cámaras en las calles porque los robos son ya «a diario»
El Ejecutivo local solicita al delegado del Gobierno una Junta de Seguridad «urgente» para tratar la inseguridad en los barrios y las diputaciones
Con miedo, inseguros y muy enfadados. Así es como se sienten los vecinos de la diputación de La Palma ante los «continuos» robos ocurridos ... en el pueblo desde hace varias semanas. Casi a diario, aseguran los palmesanos, grupos de delincuentes asaltan viviendas y casas de campo, desvalijan coches y roban bolsos, incluso a plena luz del día. Apenas hay calles o plazas que queden libres de sus delitos. El último incidente sucedió en la madrugada de este martes, sobre las cinco. Un grupo de individuos entró en un inmueble de la calle Izquierdo y se llevó objetos de valor.
Aunque peor fue el del domingo por la noche. José Manuel Rubio tenía aparcado su vehículo, marca Audi Q5, en la puerta de su domicilio, en la calle Pedrea, junto al polideportivo, y cuando se levantó para ir a trabajar ya no estaba. «Llegaron en un Seat Toledo, también robado, y no sé cómo arrancaron el mío y se lo llevaron», contó este vecino este martes a LA VERDAD. Tras avisar a la Guardia Civil, agentes de este cuerpo se personaron en el lugar y comprobaron que en el interior del Seat había un destornillador, un cuchillo y restos de sangre.
Los palmesanos dicen sentirse con miedo, inseguros y con rabia por los continuos asaltos que soportan
Esta situación se ha convertido ya en cotidiana en La Palma. Uno de los altercados que más recuerdan los vecinos es el ocurrido hace trece días en la calle Tomás Franco, en uno de los laterales de la Casa del Folclore. El jueves 20 de febrero, ocho coches sufrieron destrozos. Uno de ellos era el de Amina Zouhir, una vecina de la zona. «Me rompieron la cerradura y se llevaron el radiocaset y la batería, que sacaron arrancando los cables», señaló.
Destrozos en coches
Lo peor para ella fue el destrozo que le hicieron. A su hermano también le quitaron herramientas y objetos de valor del coche, al que le rompieron una de las ventanillas. Hicieron lo mismo en todos los coches que había aparcados. Al día siguiente volvieron a la zona, en esa ocasión a la calle Arenal, para robar en una casa y desvalijar otros tres turismos. «No sabemos cuándo nos va a tocar, porque cada vez que salimos a la calle y hablamos entre nosotros nos enteramos del último atraco. Ocurren casi a diario y esto no hay quien lo pare», explicó uno de los portavoces de la agrupación vecinal de La Palma y miembro de la Asociación de Vecinos, Ginés González.
Este malestar ha quedado patente estos últimos días con la colocación de varias pancartas en calles de la localidad. Una de ellas la volvieron a poner este martes dos vecinos, tras haber sido arrancada de la valla por el fuerte viento de este lunes. En ella se puede leer: «Robos más vandalismo. Políticos, os da lo mismo». En otra que hay muy cerca de allí, en la calle del Castaño pone: «Robos y violencia sin justicia ni competencia».
Para disuadir a los ladrones
La situación es tan tensa que la Junta Vecinal, encabezada por Pedro Obradors, del PP, ya tiene un proyecto para instalar cámara de seguridad en los accesos del pueblo y en calles principales. Así lo acordaron este martes sus representantes. Antes de materializar esta idea, dirigida a disuadir a los ladrones y ayudar a la Policía Local y a la Guardia Civil a prevenir y esclarecer posibles delitos, la iniciativa debe ser aprobada por la Delegación del Gobierno. Por eso, ese será uno de los temas que serían tratados en la Junta Local de Seguridad que la alcaldesa, Ana Belén Castejón, ha solicitado de manera «urgente» que se celebre en las próximas semanas. La petición la ha realizado al delegado del Gobierno, José Vélez, según fuentes municipales. La reunión abordaría también los problemas de seguridad y las denuncias de los vecinos de diferentes barrios y diputaciones de la zona norte, por los reiterados episodios de inseguridad que viven desde hace meses.
No es la primera vez que la alcaldesa de Cartagena hace llegar estas peticiones al delegado del Gobierno. En febrero, la primera edil ya solicitó una reunión con Vélez, que acababa de tomar posesión, para tratar este asunto. «Es urgente que desde el Ayuntamiento y la Delegación del Gobierno analicemos la realidad de la situación y establezcamos posibles soluciones, para mejorar la seguridad de los vecinos de los pueblos afectados por los robos», remarcó Castejón.
El Ayuntamiento no es el único que ha reclamado a Vélez una reunión sobre la inseguridad en los barrios y diputaciones de Cartagena. Ya lo hizo la Federación de Asociaciones de Vecinos y la Junta Vecinal de Pozo Estrecho. «Solicitaremos más efectivos de Guardia Civil que garanticen la seguridad y la tranquilidad a los residentes», subrayó la alcaldesa.
Un grupo de menores
Los vecinos culpan de la inseguridad a un grupo de menores del pueblo dirigidos, presuntamente, por un hombre que vive de okupa en la urbanización Los Naranjos. Se trata del residencial donde el Ayuntamiento tapió la semana pasada cinco viviendas allanadas por otros individuos que se han afincado en el pueblo y que, aseguran, generan gran preocupación.
Piden tapiar más casas de la Urbanización Los Naranjos
Una representación de vecinos de la Urbanización Los Naranjos de La Palma exigieron este martes al Ayuntamiento que tapie más viviendas ocupadas de forma ilegal para acabar con la inseguridad en la zona. Lo hicieron en una reunión mantenida con el concejal de Distrito, Manuel Padín. El Ayuntamiento ya cerró a cal y canto la semana pasada cinco, ante las peticiones de vecinos y asociaciones de la localidad, que se quejaban de que este núcleo residencial con viviendas nuevas abandonadas se ha convertido en un gueto. Padín explicó que no puede hacer lo mismo en los otros tres inmuebles, porque hay gente viviendo y no los puede echar. Lo único que sí podrá hacer es levantar un muro para impedir el acceso a la calle y aumentar la altura de los paredones traseros, para así impedir que nuevos ocupas entren en las casas tapiadas trepando hasta el primer piso. Padín aseguró que desde el Consistorio serán adoptadas todas las medidas necesarias, para garantizar la seguridad y la salubridad de las viviendas. También añadió que ya ha puesto el caso en manos de Servicios Sociales para buscar una solución entre todos a las familias que viven allí de forma irregular.
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