Los vecinos de La Aljorra exigen más medios sanitarios y «vigilar» las emisiones de Sabic

Pocas veces han tenido los vecinos de La Aljorra la oportunidad de expresar directamente al Pleno del Ayuntamiento su malestar por la «falta de medios sanitarios» y su inquietud por la «complicada situación medioambiental del pueblo», que achacan a la cercanía de la fábrica de producción de plásticos Sabic. Y ayer la tuvieron al comienzo de la sesión extraordinaria, que finalizó en pocos minutos y sin tratar el único punto del orden del día, la moción de MC que la motivó y que, precisamente, trataba sobre las principales reivindicaciones de esa diputación.

La voz de los aljorreños la pusieron dos representantes de la asociación vecinal, Pedro Jiménez y Francisco Cavas, quienes centraron sus intervenciones en exigir mejores infraestructuras sanitarias, cuyas deficiencias les hacen sentirse «discriminados» con respecto a otras zonas del municipio. También expresaron sus temores acerca de «la polución» que soportan por la cercanía de Sabic, así como su intranquilidad por la falta de información desde la Administración regional y la propia empresa, ante los numerosos episodios de contaminación por partículas ocurridos en los últimos meses.

Pedro Jiménez exigió la creación de una zona básica sanitaria en su pueblo, algo que conllevaría convertir el actual consultorio en un centro de salud con servicio de Urgencias las 24 horas del día. Y es que según sus cálculos, en caso de accidente, las ambulancias tardan en llegar al pueblo «entre media hora y tres cuartos de hora». Por ello pidieron la creación de un puesto del 112, que esté activo todo el día, «para atender posibles accidentes en la factoría o en las numerosas empresas hortofrutícolas y ganaderas de la zona», dijo.

Jiménez añadió que los vecinos se sienten «agraviados», porque «llevamos una década pidiendo más medios sanitarios para los cinco mil vecinos que ya somos, un número que cada año va en aumento».

Más exigente fue al hablar de «los niveles de contaminación de Sabic», de los cuales, afirmó, «nos falta información». «Es difícil de creer que el aire que respiramos está libre de tóxicos, como la empresa nos quiere hacer creer, porque de lo contrario no se entiende las inversiones millonarias que está realizando para reducir sus emisiones», añadió este representante vecinal. Por eso, recriminó a la Administración regional su «falta de control» sobre el trabajo de la multinacional.

Francisco Cavas destacó que los vecinos tienen que convivir con «extraños olores, picores de garganta y malestar general». Y en ocasiones «se notan partículas en suspensión que hacen que el aire que respiramos esté enrarecido». De hecho, aseguró, «hay días que amanece el pueblo con una especie de capa de polvo negro depositado en las terrazas de las casas». También avisó sobre la impresión de los vecinos de que «hay más casos de cáncer en el pueblo que en ningún otro».

Por ello, como Pedro Jiménez, exigió más información sanitaria sobre «lo que tenemos en el aire y el suelo» y reiteró la necesidad de un mayor control de las emisiones de Sabic por parte de las administraciones. También solicitó que en caso de alerta por contaminación, los vecinos sean informados tanto por la empresa como por el Ayuntamiento. Y alertó de que dicha polución puede afectar de la misma forma que a la salud a los productos del campo que se cultivan en las fincas de los alrededores.

En este sentido y ya con la sesión plenaria finalizada, la concejal delegada del Área de Ciudad Sostenible y Proyectos Europeos, Cristina Mora, explicó que Sabic está siendo sometida, por parte de la Comunidad Autónoma, a una nueva Declaración de Impacto Ambiental (DIA). Además, añadió la edil, también se le ha solicitado a la empresa un estudio de riesgos para la salud y otro de dispersión de contaminantes a la atmósfera, para completar la información que debe remitir a la Administración regional.

Para renovar la autorización ambiental, la empresa tendrá que aportar informes sobre las capacidades y consumo de materias primas y energía, las emisiones a la atmósfera de sustancias contaminantes y la producción de residuos. Y tiene también que demostrar la incorporación de las mejoras técnica realizadas, para el tratamiento y gestión de aguas residuales, gases residuales y residuos. LA VERDAD pidió información y una valoración de la situación a la dirección de la empresa saudí Sabic, que declinó dar su versión.

La alcaldesa, Ana Belén Castejón, agradeció en el Pleno a los vecinos su exposición y les aseguró que estudiará «detenidamente» sus reivindicaciones para trabajar conjuntamente en su solución.