Soldadores, electromecánicos, camareros y montadores, los oficios con más vacantes en Cartagena

Según los datos de ese organismo público aportados a LA VERDAD, en lo que va de año han gestionado 6.083 ofertas de empleo, de las que 339 no han sido adjudicadas. Las ocupaciones más difíciles de cubrir son operadores de maquinaria, soldadores, montadores de fachadas, jefes de obra, montadores electromecánicos, peones de industria manufactureras y camareros.

Según los técnicos de SEF, entre los motivos por los que muchos de estos puestos que se quedan vacantes están «que nos se han presentado los candidatos y que los seleccionados no cumplen los requisitos básicos de adecuación al puesto».

También ocurre que los aspirantes no están de acuerdo con las condiciones de trabajo, como el salario, la jornada laboral y los horarios. Pero donde más hacen hincapié es en que los que se presentan al puesto no tienen las condiciones técnicas necesarias para ocuparlo.

Donde más lo notan es en la industria. En este sector, los empresarios tienen, a veces, que rifarse a los pocos trabajadores especializados en ciertos oficios. Tanto es así que llegan a quitárselos los unos a los otros. Vicente Balbín, uno de los gerentes de Aralia Global, empresa ubicada en El Algar y dedicada al montaje industrial, la soldadura y la metalurgia, sabe muy bien que es «complicado» encontrar a soldadores, tuberos y montadores, «sobre todo en ciertas épocas del año cuando tenemos paradas de mantenimiento».

Es entonces cuando no tienen más remedio que echar mano de su agenda y llamar a trabajadores de fuera de la Región de Murcia. «El pasado año, para atender los proyectos de Repsol, tuvimos que contratar a cincuenta obreros de fuera», dijo. Él es uno de los que apuesta por la cantera. Los forma según sus intereses, porque sabe que los que llegan de los institutos tienen mucha teoría, pero poca práctica.

En el sector hostelero, la escasez de camareros la notan casi a diario, pero sobre todo en las temporadas de verano, Navidad y Semana Santa. El vicepresidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Cartagena (Hostecar) y su Comarca, José Luis Gestoso, explicó que cada vez les cuesta más cubrir las vacantes y ampliar las plantillas cuando es necesario.

«El sector ya no es lo que era. Ahora se trabaja respetando los horarios y los sueldos están bien. La situación ha cambiado tanto que son ellos los que nos eligen», detalló. El inconveniente que se han encontrado este año los hosteleros es que «muchos jóvenes solo querían trabajar un mes y el otro tenerlo libre». Eso les ha obligado a reducir los horarios de atención al cliente y a cerrar hasta dos días a la semana, algo que en años anteriores era impensable para el empresario en plena temporada turística.

Esa situación también afecta al sector de la construcción. Desde la Asociación de Empresarios de la Construcción y Actividades conexas en Cartagena y su Comarca apuntan a que la falta de formación en ciertos oficios ralentiza algunos proyectos. Además de jefes de obra y montadores de fachadas, les faltan pintores, albañiles, peones de la construcción, operarios de puesta en obra de hormigón, técnicos en construcción, carpinteros metálicos y montadores de instalaciones de placas de energía solar.

En ese sector es difícil encontrar soluciones, pero en el industrial y el hosteleros las administraciones y las patronales están tomando medidas para formar personal y aumentar la cualificación de los profesionales.

La falta de un centro de formación específico del sector industrial, como el que proyecta la Federación Regional de Empresarios del Metal de Murcia (Fremm) en el polígono de Los Camachos, ha obligado a la patronal y al Ayuntamiento a unirse para, a través de los institutos y centros formativos, preparar a obreros y desempleados para ocupar los 3.000 puestos de trabajo que precisan cubrir ahora empresas de toda la Región, aunque principalmente en la comarca cartagenera. Son parte de los 18.000 que se prevén crear durante la próxima década en los sectores productivos más importantes del municipio.

Las dificultades para cubrir ciertos oficios, sobre todo del sector industrial, tienen su reflejo en los institutos y centros integrados de Formación Profesional (CIFP) del municipio. Los puestos que más le cuesta cubrir al Servicio de Empleo y Formación (SEF), como operadores de maquinaria, soldadores, montadores de fachadas, jefes de obra, montadores electromecánicos, peones de industria manufactureras y camareros, tienen ciclos formativos adaptados que casi todos los años cubren sus plazas.

En el CIFP Politécnico imparten ciclos para enseñar los oficios de soldador, montador electromecánico y operador de máquina. Son títulos muy demandados, que tienen un índice de empleabilidad por encima del 90% y que entrar en ellos requiere una serie de requisitos.

Algo similar ocurre en el CIFP de Hostelería y Turismo, donde estudiar un grado relacionado con la profesión de camarero también es complicado por el número de solicitudes que tiene. Pese a ello, prácticamente todos los que terminan los estudios acaban trabajando. El resto de profesiones, como las de montadores de fachadas y jefes de obras, son formaciones que se imparte en distintos institutos de Murcia.

La FP sigue su camino ascendente este curso. El tirón cada vez más fuerte de este tipo de estudios, por las salidas laborales, la formación práctica en empresas y las facilidades para acceder a los estudios universitarios han hecho que la demanda cada año en la última década no deje de crecer. Eso se nota ya en los institutos. La Consejería de Educación, Formación Profesional y Empleo ha ofertado otros trece grados básicos, medios, superiores y de especialización. Es en el año en que toda la FP será impartida solo en el sistema dual, aquel en que el alumnado alterna su formación entre centros educativos y empresas, que serán corresponsables en la educación desde el primer año.