La reforma de la estación de trenes de Cartagena incluirá el cambio de cubierta y el rediseño del vestíbulo

A las tareas proyectadas –la rehabilitación del edificio de viajeros, la reordenación de su entorno urbano inmediato y la introducción de una nueva marquesina en el andén de cabecera, con eliminación de las barreras arquitectónicas– se le sumarán ahora el arreglo del forjado de la cubierta del edificio central, un inmueble ubicado en la Plaza de México, que fue construido en estilo modernista en 1908, por un grupo de arquitectos dirigidos por el ingeniero Ramón Peironcely.

«Dicho estado requiere una intervención diferente y de mucha mayor envergadura que la prevista inicialmente, lo que exige la redacción de un proyecto modificado que, además, debe incluir necesidades adicionales detectadas, como un nuevo diseño del cuadro general de baja tensión y modificaciones importantes en las acometidas de abastecimiento de agua y de saneamiento», detallaron fuentes de Adif, un organismo dependiente del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.

Por otro lado, el administrador ferroviario recibió hace unas semanas un informe desfavorable del Servicio de Patrimonio Histórico de la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Comunidad Autónoma. Éste obliga a rediseñar el vestíbulo de la estación para integrar elementos de mobiliario histórico existentes en la actual estación.

Fuentes de Adif indicaron a LA VERDAD que sus técnicos ya están trabajando «en la autorización para la redacción de un proyecto modificado que permita reanudar las obras cuanto antes». Las mismas fuentes no detallaron la fecha de cuándo podrían retomar las obras de rehabilitación la empresa encargada de la mismas.

Aún queda buena parte del trabajo previsto sin hacer. Las labores de arreglo en las fachadas principales de los edificios están casi acabadas. Precisamente, el diseño del proyecto recoge la conservación de los elementos característicos. El proyecto incluye la reparación de elementos deteriorados y la rehabilitación de las vidrieras, de los azulejos y de la mampostería originales. También, la sustitución de toda la carpintería. Todo ello está pendiente.

En la explanada exterior está previsto habilitar un aparcamiento exprés, con plazas exclusivas para personas de movilidad reducida y espacio de vehículos de alquiler, que incrementarán la funcionalidad de la estación. El resto del aparcamiento existente en la actualidad bajo la plaza de la estación seguirá prestando idéntico servicio.

Una de las grandes apuestas del proyecto de remodelación de la estación era la creación de una marquesina en el andén de cabecera que, además de resguardar al usuario de las inclemencias meteorológicas, proporcionaría energía suficiente para abastecer el edificio, gracias a la instalación de paneles fotovoltaicas en su cubierta. El espacio exterior será reordenado, liberando la fachada principal para uso peatonal, en conexión directa con el espacio destinado a la parada momentánea de vehículos, estacionamiento de taxi y autobuses urbanos.

Para ver la nueva imagen proyectada para la estación de trenes de Cartagena habrá que aguardar algún tiempo. La modificación del proyecto por parte de los técnicos de la Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) y la posibilidad de retomar las obras se llevará aún buena parte de este año. Adif no da fechas, pero casi con total seguridad hasta el próximo año los viajeros que usan el tren para sus traslados seguirán viendo una imagen que dista mucho de la que debería ser.

Llama la atención los contenedores de obra, que aunque lejos de la vista de los usuarios se pueden ver, junto a otros materiales de obra. Pero lo que más destaca es el estado en que se encuentran los pabellones laterales de las instalaciones. En los inmuebles está previsto crear nuevas áreas para los trabajadores, como vestuarios, sala de descanso, zona para personal de seguridad y un almacén. Los elementos más característicos, como el falso techo de artesonado en madera y las lámparas modernistas, serán conservados.

Todas las actuaciones previstas, según indicaron al inicio de la obra desde el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias, son compatibles con las acciones futuras que permitan la llegada de la alta velocidad a la ciudad. En este caso, la intención de este organismo es construir otro edificio junto al actual, donde ahora están las grandes carpas blancas construidas el pasado año y que hacen de talleres para los trenes.

La idea es que los accesos a los andenes se hagan sin cambiar de nivel. Además, será ampliada la superficie del vestíbulo y la zona de embarque. También habrá una instalación disponible para locales comerciales, venta de billetes, atención al cliente, aseos y zonas para usos ferroviarios.