Borrar
Fotografía de Pascual Cervera y Topete.
Pascual Cervera y Topete en la Sublevación Cantonal de Cartagena

Pascual Cervera y Topete en la Sublevación Cantonal de Cartagena

El almirante, calificado de fascista por políticos indocumentados, tuvo una actuación sobresaliente en la Guerra Civil de 1873-74

LUIS MIGUEL PÉREZ ADÁN

Sábado, 21 de abril 2018, 12:03

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Según los historiadores, no existe relación alguna entre el conocido almirante Cervera y el fascismo, algo que recientemente se ha puesto en duda por parte de algún político poco documentado y algo desinformado. Los personajes históricos, el almirante Cervera lo es, se definen por haber realizado algo sobresaliente en cualquier actividad o ámbito social. Hoy nos acercaremos a la presencia de este militar español en la historia de nuestra ciudad.

Pascual Cervera y Topete (Medina Sidonia, 1839-Puerto Real, 1909), tras completar su formación en la escuela naval, participó en numerosas acciones militares, tanto en el exterior como en el interior: en Marruecos (1853 y 1859); en la expedición a la Conchinchina y las Islas Filipinas (1862-65); en la guerra contra el Perú (1866); en el bloqueo de los puertos cubanos, al comienzo de la insurrección (1868); en el levantamiento cantonal de Cartagena (1873); en la guerra carlista (1874); y en Filipinas nuevamente (1874-76). Fue ministro de la Marina con el gobierno progresista de Mateo Práxedes Sagasta y es, sobre todo, conocido por comandar la escuadra española que perdió la batalla naval de Santiago de Cuba en 1898.

De todo ello, nos centraremos en su participación en la denominada Sublevación Cantonal de Cartagena. El surgimiento de cantones fue un movimiento federal de carácter revolucionario que ocurrió en 1873, durante la Primera República, y que fue sometido por el Ejército, por órdenes del Gobierno. El de Cartagena fue el más importante. Cervera participó al lado de las fuerzas gubernamentales en sofocar esta insurrección, y especialmente en un episodio concreto que trataremos de explicar.

Nos encontramos en el verano de 1873. Los cantonales de Cartagena darían un nuevo y peligroso paso en su carrera por intentar extender la Sublevación Cantonal por otras zonas del país, que, en este caso, terminaría con un grave incidente (nuevamente protagonizado entre buques cantonales y extranjeros). Ese choque tuvo una gran repercusión en los acontecimientos posteriores.

El 28 de julio zarpaba de Cartagena su tercera expedición naval, compuesta por la fragata blindada 'Vitoria' y la de madera 'Almansa', con unas dotaciones próximas a los 1.200 hombres y una tropa embarcada de otros 1.000 hombres de Infantería e Infantería de Marina. Tenía el encargo de recorrer la costa andaluza y apoyar a los federalistas intransigentes de las provincias de Almería, Granada, Málaga y Cádiz. Finalmente estos dos barcos fueron capturados por la flota internacional y recluidas en la dársena de Escombreras, desembarcando a los cantonales y quedando los barcos a disposición del Almirante inglés Yelverton. Desde ese mismo momento, se inician gestiones por parte del gobierno español para su recuperación y entrega al bando centralista.

Aquí es donde emerge la figura del entonces capitán de Fragata Pascual Cervera y Topete como integrante de la Flota comandada por el contralmirante Lobo, que luchaba contra los cantonales.

Actuaba Cervera como «secretario del contralmirante Lobo». En una acción verdaderamente novelesca, Pascual Cervera embarcó en la goleta de hélice 'Prosperidad', con el encargo de entrevistarse con Yelverton y conseguir para el gobierno de Madrid las dos fragatas cantonales. Haciéndose pasar por un buque francés, engañó a los cantonales y pudo llegar hasta los barcos extranjeros que bloqueaban el puerto de Cartagena. El inglés recibió a Cervera con verdadera sorpresa (eran las dos y media de la madrugada) y le comunicó que efectivamente entregaría las fragatas apresadas al gobierno español, aunque solamente a las personas que estuvieran debidamente autorizadas por el mismo y, además, fuera de las aguas de Cartagena. Le mencionaron ya la posibilidad de que fuera en Gibraltar, para evitar cualquier posible enfrentamiento con los cantonales.

Finalizada la entrevista, Cervera regresó a su buque, con el que zarpó poco después en dirección a Almería, aunque haciendo inicialmente una falsa derrota hacia Orán, para no levantar las sospechas de los buques cantonales. Éstos en ningún momento se apercibieron de la realidad de lo que estaba ocurriendo. Nada más salir de la bahía de Escombreras, la goleta 'Prosperidad' (que todavía enarbolaba pabellón francés), engañó nuevamente a los buques cantonales que vigilaban aquella zona.

A su llegada a Almería, Cervera informó al gobierno de Madrid de estas exigencias, y allí mismo recogería las debidas acreditaciones gubernamentales exigidas por los británicos. Posteriormente, se trasladó a Gibraltar, a la espera de poder hacerse cargo de las fragatas, algo que ocurrió días después y que igualó en barcos a las flotas centralista y cantonal.

Por esta arriesgada acción, Cervera fue propuesto para la máxima condecoración, la Laureada de San Fernando. Pero finalmente fue recompensado con la Medalla de la Guerra Civil de 1873-1874.

Cervera fue un destacado almirante de la Armada Española. Con calle o sin ella, los hombres hacen su propia historia, pero no la hacen a su libre arbitrio, bajo circunstancias elegidas por ellos mismos, sino bajo aquellas circunstancias con que se encuentran directamente, que existen y que les han sido legadas por el pasado. En este caso, Cervera no ha pasado a la historia como un fascista.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios