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Apertura de una zanja en Llano del Beal para quitar acometidas de plomo, este mes. pablo sánchez / agm
La oposición exige agilizar la retirada de las tuberías de plomo y fibrocemento

La oposición exige agilizar la retirada de las tuberías de plomo y fibrocemento

MC denuncia la ampliación de los tramos de 'uralita' 92 kilómetros en 8 años, e Hidrogea dice que el uso de ese material es anterior al inicio de su contrato

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Miércoles, 22 de agosto 2018, 08:37

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Los cuatro grupos políticos de la oposición en el Ayuntamiento de Cartagena han coincidido en pedir al equipo de gobierno, del PSOE, que dé prioridad a la retirada de las acometidas de plomo y a las tuberías de fibrocemento (amianto), por el riesgo de transferencia de metales pesados. PP, Ciudadanos y Podemos se han sumado a la exigencia de MC de que el Consistorio, a través de Hidrogea, concesionaria del servicio de aguas, agilice al máximo la sustitución de entronques y canalizaciones obsoletos de la red municipal. MC, además, exigió ayer explicaciones sobre un informe oficial que releva la existencia de 85 kilómetros más de tuberías de 'uralita' que hace diez años.

Las autoridades municipales y la concesionaria han hecho hincapié en que sus respectivos análisis garantizan la seguridad del consumo humano, y que este año hay prevista una inversión de 716.000 euros para renovar acometidas en ocho poblaciones: Llano del Beal, El Beal, El Algar, Los Mateos, Santa Lucía, Los Magteos, Alumbres y Los Roses de Canteras. No obstante, los partidos reclaman eliminar por completo el potencial peligro y ofrecer la máxima calidad del agua, conforme al Real Decreto del año 2003 sobre criterios sanitarios del agua de consumo.

La empresa calcula que, al ritmo de 1.500 a 1.800 acometidas al año, tardará entre tres y cuatro años en quitar las cerca de 6.000 que aún quedan repartidas por todo el municipio. Se trata, aproximadamente, de un 9% de las 61.000 registradas en Cartagena, si bien no hay un inventario que detalle su ubicación. Estos datos excluyen la zona de La Manga, donde el suministro depende de la empresa Potalmenor, aunque los llamados análisis del agua de grifo corresponden a Hidrogea, según indicaron fuentes municipales. En todo caso, fuentes de Potalmenor aseguraron ayer a 'La Verdad' que en esta zona del litoral no hay acometidas de plomo, y que hace dos años acabó la retirada de todas las tuberías de fibrocemento.

La concesionaria afirma que, desde su llegada en 1992, solo ha empleado fundición y polietileno

Los partidos se acusan entre sí de haber frenado inversiones en la mejora de las infraestructuras

El portavoz de MC, José López, denunció este martes que la propuesta de tarifas de 2018 realizada Hidrogea detalló que hay 898,9 kilómetros de tuberías de fibrocemento. Son 92,2 más que en el registro de 2010. «Ésta es otra cuestión que [la alcaldesa] Castejón tendrán que explicar, porque la fabricación de materiales con amianto está prohibida en España desde 2002». López tema que alguien «haya engordado las cuentas para introducir sobrecostes», por lo que llevará el asunto al Pleno del Ayuntamiento y a la Fiscalía.

El exalcalde y exconcejal de Infraestructuras, José López, insistió en que Hidrogea ha incumplido con las acometidas el Real Decreto de 2003, «que fijaba como plazo máximo para la retirada el 1 de enero de 2012». La prueba, dijo, es que ella misma planteó inversiones sobre la base de esa normativa.

Comisión, Pleno y Fiscalía

Una portavoz de Hidrogea atribuyó el dato sobre el fibrocemento al resultado de una «inspección exhaustiva» de la red municipal. Añadió que se trata de instalaciones previas a 1992, año en que empezó la concesión de la empresa, «que nunca ha usado este material», pues emplea fundición y polietileno. Torralba no aclaró los planes del Ayuntamiento respecto al fibrocemento.

El portavoz municipal del PP, Francisco Espejo, denunció que el gobierno de coalición de López y Castejón «antepuso sus intereses partidistas a los intereses generales de los cartageneros», en su «guerra abierta contra la concesionaria». Espejo les acusó de «haber ocultado información, porque nunca se nos informó de la situación de las acometidas, ante el riesgo de metales pesados, ni en la Comisión de Seguimiento del Agua ni en ningún otro foro».

«Este gobierno no ha cumplido con sus obligaciones de control y seguimiento de la concesionaria, y ha torpedeado tres años la retirada de acometidas de plomo y otros metales pesados. Le exigimos más transparencia y que no oculte qué problemas hay», añadió el edil. Y dijo que en la legislatura pasada, siendo él responsable de Infraestructuras, «el PP realizó cambios en varias calles del municipio para la mejora de la red de saneamiento, renovando acometidas antigua».

Ciudadanos repartió culpas. Dijo que comarcalistas y socialistas «impidieron durante tres años las obras», al confundir la «fiscalización» con decisiones «irresponsables, temerarias y dañinas». Sobre MC, el portavoz de Cs, Manuel, Padín, dijo que «es delirante que el partido que ha bloqueado tres años las obras de renovación de las tuberías, se atreva a decir ahora que la empresa juega con la salud de los cartageneros».

Como en los colegios

Respecto a PP y Podemos, Cs lamentó «el cinismo y la desfachatez política» de haber apoyado en junio una moción de MC para destinar el superávit a diversas obras. «No destinaron un solo euro ni hicieron mención a la renovación de las acometidas de plomo, a pesar de que esos tres grupos conocían el problema, al menos desde septiembre de 2017, cuando Hidrogea lo expuso públicamente», dijo Padín. Cs optó se abstuvo, según su líder, porque «considera que un plan de inversión tan importante debe realizarse entre los expertos de Hidrogea y los del Ayuntamiento, y no por caprichos e intereses políticos».

En Podemos, Francisco Martín calificó de «intolerable que el gobierno municipal consienta que la red públicacontenga tramos de plomo o de fibrocemento». El edil exigió su «retirada inmediata» y condenó la «ocultación de información».

«Todos sabemos que simples trazas de amianto están elevando los casos de cáncer en la población», añadió Martínez. Y concluyó: «Si todos exigimos la eliminación de los tejados de uralita y otros elementos de amianto de colegios e institutos, aún más debemos exigir la retirada de las conducciones de agua de amianto, que afectan a toda la población».

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