Ibermutuamur atenderá a 43.000 trabajadores en 2023 en su nuevo centro de Santa Lucía
Las instalaciones, que ya tienen licencia de obra y salen ahora a licitación, tendrán 50 trabajadores y suponen una inversión de cinco millones
Ibermutuamur prevé poner en marcha, en 2023, el centro en el que atenderá a 43.000 trabajadores por cuenta ajena y autónomos de Cartagena y del Mar Menor, lo cual representa un 15% de sus clientes en la Comunidad y el 7,5% del total de dados de alta en la Seguridad Social en la Región de Murcia. En el complejo asistencial trabajarán 50 empleados, de los que 15 serán nuevos empleos y 35 serán trasladados de las dos instalaciones que la mutua gestiona ya en Cartagena en régimen de arrendamiento. El proyecto fue presentado este martes en el Palacio Consistorial por el director territorial de la compañía, Eduardo Ruiz, en compañía de la alcaldesa, Ana Belén Castejón.
Cinco millones de inversión supone el proyecto, de los que tres son para construir un edificio de 2.700 metros cuadrados y dos plantas. Ocupará una parcela de 3.000 metros cuadrados, cuya adquisición costó un millón y que está entre la Avenida Sánchez Meca, la calle Camino de la Escuela. y la carretera nacional CT-32, que conduce al la rotonda de la Grúa Sansón y al puerto.
«Es un lugar bien comunicado y de fácil acceso, que además nos permite unificar las instalaciones que teníamos divididas en dos partes», subrayó Eduardo Ruiz. Además, ocupa un lugar estratégico muy cerca del Hospital Santa Lucía, que está al otro lado de la CT-32.
La cartera de servicios de las instalaciones incluirá las prestaciones por accidente de trabajo, tanto sanitarias como en lo referente a subsidios. También labores de prevención. Asimismo, se gestionarán la aprobación y los pagos por bajas laborales y los casos de cese de actividad por incapacidad u otros motivo.
Para ello, el edificio contará con las áreas de asistencia sanitaria, incluidas urgencias, radiología, traumatología, hidroterapia, terapia ocupacional y unidad de salud mental con psicología y psiquiatría. Además, incorporará una 'escuela de espalda' para «formar a quienes padecen problemas en esa zona del cuerpo en conductas y hábitos ergonómicos, para evitar lesiones», según Ruiz. También habrá un laboratorio de biomecánica, para detectar patologías de trabajadores accidentados y tratar dolencias profesionales. «Contaremos con un gabinete de telemedicina, que tan útil se ha demostrado que es durante el confinamiento», indicó el director territorial. A todo ello se unirán las dependencias para la rehabilitación.
La cartera de clientes de este centro estará compuesta por 30.000 trabajadores por cuenta ajena de Cartagena y su entorno más cercano, de otros 8.000 del área del Mar Menor, donde Ibermutuamur tiene un centro que funciona fundamentalmente como dependencia administrativa y de 5.000 autónomos. Esa afluencia puede tener un efecto multiplicador de la economía de esta zona del barrio, en la que hay, asimismo, otros proyectos en marcha.
Este centro forma parte de una unidad urbanística en la misma manzana en la que hay previstas 316 viviendas, aunque el proyecto aún es solo un borrador. En la parcela anexa, también pegada a la CT-32, está prevista la ampliación del Instituto Hespérides. La parcela fue cedida el año pasado por el Ayuntamiento y este año hay presupuesto de la Consejería de Educación para hacer las obras de ampliación de este centro educativo.
El plan de ceder otro solar contiguo para hacer la Ciudad de la Justicia fue desestimado, pero allí aun está en cartera la construcción de un aparcamiento disuasorio. Por último, en la confluencia con la carretera de La Unión están concedidos los permisos para hacer otra promoción inmobiliaria con 370 casas.
«Cartagena sigue creciendo gracias a este proyecto y a otros que se harán realidad pronto», explicó Ana Belén Castejón, durante la presentación. A ello contribuye, según ella. «la tenacidad y las ganas de dar facilidades de este Ayuntamiento». «Cartagena es un lugar emblemático para invertir», añadió.
Eduardo Ruiz coincidió en que la Concejalía de Urbanismo se ha implicado y ha sido ágil en dar los permisos. «De hecho, nos ha sorprendido agradablemente que la licencia nos ha sido concedida antes de la licitación. Eso hay muchos ayuntamientos en los que no pasa», subrayó.
