Gastronomía, buceo y eventos deportivos tiran del turismo de La Manga en octubre

Para los empresarios de esta zona costera de Cartagena, este mes de octubre «atípico», es un signo de desestacionalización del turismo, aunque confiesan que aún queda mucho por hacer, ya que pasado estos últimos días del mes solo quedará el cierre. Lo harán muchos negocios que han aguantado los últimos coletazos del turismo, y la mayoría de los hoteles. Estos colgarán el cartel de cerrado por vacaciones a finales de noviembre o ya en diciembre.

Los hoteleros son los que más lo están notando en sus establecimientos. Un ejemplo de ello ocurre estos día en el Hotel Cetina Cabo de Palos Puerto, cuyo gerente, Ezequiel Palas, aseguró que los fines de semana apenas le quedan plazas libres y que entre semana la ocupación es bastante alta.

«No tenemos referencia con otros años, pero estamos muy contentos. El 12 de octubre llenamos», aseguró. Se trata de un hotel de tres estrellas que comenzó su andadura antes del verano con la idea de estar abierto durante todo el año. Con la apertura de este hotel, la localidad costera suma en dos años 178 nuevas plazas hoteleras en establecimientos que buscan la sostenibilidad. En julio de 2022 abrió un 'hostel' con 38 plazas y poco después, un complejo de dieciséis apartamentos destinados al alquiler turístico.

Precisamente, en Sub-Up Hostel también notan esta afluencia de clientes. Lo sabe su gerente, José Enrique Cárceles, porque casi todos los fines de semana «hemos tenido eventos deportivos, a lo que hay que sumar los que vienen a bucear». Entre ellos destaca el celebrado hace dos semanas, el 'Swim Run' de Cabo de Palos 2024, una prueba combinada de natación en aguas abiertas y trail de montaña, que reunió a decenas de competidores. El próximo 28 y 29 de octubre, este enclave costero también acogerá la IV Sup Challenger, un campeonato de España de Paddle Surf. Este fin de semana ha acogido otra competición de natación en aguas abiertas y el 25 de este mes similar a la anterior.

Pero no solo de los eventos viven los hoteles, también hay congresos, como el que ha acogido esta semana sobre medicina Las Gaviotas. Han participado alrededor de 250 personas llegadas de diferentes países. «De media, este mes los fines de semana hemos estado por encima del 80% de ocupación y entre semana, en un 60%», señaló el gerente, Pedro López.

«Los eventos son los que están tirando del turismo. Se está viendo a mucha gente este mes de octubre gracias a ellos, pero también a los aficionados a los deportes de vela», indicó el presidente de la Asociación de Empresarios y Comerciantes de La Manga y Cabo de Palos, José Espinosa.

Eso lo sabe muy bien David Caro, el presidente de la estación náutica Mar Menor, una entidad sin ánimo de lucro que agrupa a empresas de alojamiento, ocio y tiempo libre de La Manga y Cabo de Palos. Él, como el resto de sus socios, ha tenido este mes de octubre «más grupos de colegios e institutos que el pasado año», confesó. «Antes venían solo en mayo y junio, pero ahora también por estas fechas, aprovechado el buen tiempo que está haciendo», añadió.

Pero si hay un sector que atrae ahora a más turistas ese es el de buceo. La costa cartagenera tiene todo lo que busca un aficionado a este deporte, principiante o experto. Pueden hacer un bautismo de buceo, aunque para quienes tienen más experiencia, existen opciones para todos los niveles, desde buceo nocturno hasta rutas más técnicas recomendadas solo para expertos.

Quienes prefieran otra forma de disfrutar el mar está el esnórquel, una excelente alternativa, que se puede disfrutar por libre o en actividades guiadas. «Este año hay más gente que en 2023, sobre todo los fines de semana. Muchos vienen para un par de días desde Madrid y entre semana se ve mucho catalán», indicó el director gerente del Club Planeta, en Cabo de Palos, Fernando Cler.

Este tipo de turismo tiene su reflejo en los establecimientos de hostelería. El vicepresidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Cartagena (Hostecar), Luis Gestoso, afirmó que «sábados y domingos están siendo fuertes», y de lunes a viernes «más tranquilos».

Los empresarios creen posible una desestacionalización y reducir el porcentaje de negocios que llegado septiembre y octubre cierran sus puertas hasta mayo y junio del año siguiente. Actualmente, solo dos de cada diez empresas que están ubicadas en La Manga ofrecen sus servicios todo el año. Para aumentar ese número ven necesario hacer una serie de mejoras en la zona, entre ellas el transporte, tanto en invierno como en verano, aunque también de los servicios y de ciertas infraestructuras.

Las obras de reforma de la bocana de Cabo de Palos, cuyo proyecto prevé convertir la zona en un área de esparcimientos para los vecinos y turistas, comenzarán este próximo lunes 21 de octubre. Será, entonces, tras superar varios escollos que provocaron que los trabajos se retrasaran. Entre ellos estaban diferentes alegaciones al proyecto por parte de colectivos sociales y vecinales. Una vez resueltos, la idea era empezar en junio, pero se prefirió hacerlo ya tras el verano para que el movimiento de máquinas y obreros no interfiriera en el bienestar de los visitantes en época estival.

El área de actuación en la bocana del puerto comprende una superficie de 1.384 metros cuadrados que se dividen en tres zonas. Por un lado, la plaza, de 870 metros cuadrados de superficie, que será pavimentada para dar continuidad al actual paseo del puerto. Por otro, el espigón, con una superficie de 400 metros cuadrados, en donde se añadirá un nuevo espacio de hormigón especial para ambientes marinos. Por último, en la escollera, de unos 115 metros cuadrados, se realizaría una actuación de regularización, estabilización, compactación y relleno de algunas zonas próximas al espigón.

El proyecto incluye la iluminación del espacio con la instalación de torres. Una de ellas será ubicada al final del paseo del puerto marcando el inicio de la actuación en la bocana. Además se plantarán palmeras y flora autóctona, habrá un panel explicativo del entorno, se recreará una vagoneta y se añadirán bancos de descanso.

Con el objetivo de evitar el tránsito no autorizado de vehículos en la zona, el proyecto prevé el control de los mismos frente a la lonja mediante pilonas automáticas, que solo darán acceso a suministros para restaurantes, la lonja, eventos puntuales y mantenimientos. Estas pilonas permitirán eliminar los actuales bolardos que se encuentran frente al paseo del puerto junto a la gasolinera.