El estado de varias carreteras secundarias de Cartagena desata un aluvión de quejas vecinales

Este colectivo ha solicitado al Ayuntamiento y a la Comunidad Autónoma la realización de obras de mantenimiento, arreglo y mejora del diseño en cerca de una decena de viales del municipio. Al proyecto de reconstrucción del firme en la carretera RM-602 y de los enlace con varias vías de servicio, cuyo peligro de accidentes ha llevado a los trabajadores de Sabic a organizar concentraciones de protesta este mes, la Federación une la carretera entre Pozo Estrecho y Miranda, en el tramo de unos 500 metros más cercano a la primera localidad. La vicealcaldesa, Ana Belén Castejón, ya ha pedido la reparación a la Dirección General de Carreteras de la Comunidad.

Asimismo, la Federación solicita el reasfaltado, la limpieza de los arcenes y la construcción de una glorieta en el cruce con Galifa, todo ello en el vial que conecta Canteras con La Azohía, a través de las Cuestas del Cedacero.

Asimismo, la entidad que preside Leandro Sánchez respalda la iniciativa del Consistorio de reclamar a la Consejería de Fomento que termine la adecuación del camino de evacuación de Alumbres hacia La Unión en caso de un accidente industrial en Escombreras. Son unas obras que el Gobierno regional dejó a medio hacer años atrás, aunque expropió los terrenos, y que el Pleno municipal instó la semana pasada a retomar a la Consejería que dirige José Ramón Díez de Revenga.

Asimismo, la Federación ha advertido del riesgo de siniestros y los daños que ya ha causado el abandono de la carretera E-26, entre La Corona, en Perín, y Cuesta Blanca. «En algunos tramos, sobre todo en las curvas, el firme está cortante y las cubiertas de los vehículos se rajan con facilidad. Además, el retraso en repintar las marcas viales reduce la visibilidad», explicó a LA VERDAD Pedro Manuel Díaz, vocal de infraestructuras de la Federación.

Esta agrupación también solicita la ampliación de las obras realizadas en el eje transversal para poner pantallas acústicas. «La partida que destinaron a colocarlas en la de Nueva Cartagena fue irrisoria. No terminaron de rematar la actuación en esta circunvalación, para colocar quitamiedos y para solucionar los desniveles cercanos a la rotonda de 'la 1900'», señaló Díaz. E instó a las autoridades a atender la petición de bandas de reducción de ruidos realizadas por residentes de tres distritos: Los Dolores, Fuente Cubas y Los Barreros.

En el caso de la RM-22, la de Canteras a La Azohía, indicó que «los arcenes están llenos de vegetación desde hace años, por lo que los ciclistas se ven obligados a meterse mucho en la calzada y eso genera riesgo de atropellos». Además, «hay varios puntos con desniveles, sobre todo en la zona de Torre de Nicolás Pérez, pero siguen sin destinar una partida presupuestaria para solucionarlo».

Por último, en la Federación recordaron su reivindicación de que el Ayuntamiento y la Comunidad modernicen por fin el Camino del Sifón, para evitar inundaciones y facilitar el tránsito entre la ciudad y Santa Ana, Los Dolores, Hispanoamérica y Molino Derribao. También pide renovar la salida noroeste de Santa Ana, por donde pasan muchos tractores agrícolas.

En el caso de la RM F-36, que une Cartagena con Torre Pacheco por La Palma, el PSOE exigió ayer de nuevo su desdoblamiento. La diputada Carmina Fernández se desplazó a la carretera e instó al PP y a los grupos que apoyan al Gobierno autonómico a aceptar una inversión de 4 millones de euros y rechazó el plan de Fomento de mejorar solo las intersecciones y la señalización. Recordó que de 2003 a 2020 ésta fue «la segunda carretera con más siniestralidad en la Región y la primera en accidentes mortales, con 19 fallecidos. También fue la segunda con más heridos leves. Y hubo 300 siniestros, casi dos al mes.