Borrar
Vecinos ponen cruces sobre un depósito minero, ayer en Llano del Beal.

Ver fotos

Vecinos ponen cruces sobre un depósito minero, ayer en Llano del Beal. PABLO SÁNCHEZ / AGM

Cruces contra el plomo en Llano del Beal

Vecinos de varias calles ponen carteles para denunciar el arrastre de polvo contaminado por metales pesados desde balsas mineras sin sellar

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Jueves, 23 de agosto 2018, 02:14

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

«Plomo (Pb): 48.380 miligramos por kilo cada metro cuadrado. Arsénico (As): 1.300 miligramos por kilo cada metro cuadrado». Los nombres de estos y otros metales pesados, así como los volúmenes de cada uno de ellos que un científico afirma haber hallado en las afueras del pueblo y en distintas casas, lucen desde ayer por la tarde en Llano del Beal. Lo hacen junto a símbolos de riesgo químico para las personas, en casi cuarenta cruces plantadas por una decena de vecinos. Éstos recorrieron varias zonas, vestidos con trajes blancos de protección individual frente a riesgo tóxico y mascarillas. Los residentes también exhibieron pancartas con lemas como «Stop metales pesados. Sí a la vida».

En esta acción de protesta participó el investigador y experto en suelos contaminados José Matías Peñas, quien ha presentado una nueva denuncia por contaminación ambiental y daños a la salud pública, ante la Fiscalía de Sala de Medio Ambiente, en Madrid. Peñas asegura, en un informe, haber hallado en los últimos meses 8.000 partes de plomo por millón por encima del tope legal. «Es una auténtica bomba de relojería para la salud de los habitantes», asegura Peñas, quien considera sus resultados «lo suficientemente graves como para la adopción de medidas preventivas inmediatas y urgentes por parte de las administraciones públicas».

El verano pasado, Peñas denunció los riesgos para los escolares del colegio público San Ginés de la Jara y, junto a la asociación de padres, forzó a la Comunidad Autónoma y al Ayuntamiento a pavimentar el patio, cambiar ventanas y contener las escorrentías de agua, al menos de forma parcial, en las inmediaciones.

Uno de los motivos de preocupación de Peñas y de la Plataforma sigue siendo el arrastre de polvo desde la zona donde estaba la Balsa Yenny, trasladada a Los Blancos por el riesgo de derrumbre, y de depósitos como La Paz y Cantera Emilia. Según el estudio científico, basado en muestras de tierra y del polvo filtrado hacia las casas, hay «niveles elevadísimos» de al menos una decena de metales: plomo, arsénico, cadmio, plata, zinc, níquel, cobre, manganeso y antimonio.

«Hay zonas, como la Plaza de Colón y la calle José Rosique, donde muchos vecinos han fallecido o han enfermado de cáncer de pulmón y de otros tumores. Y tememos que eso tenga relación con la exposición a residuos tóxicos y peligrosos, por la pasividad de la Administración a la hora de hacer cumplir la ley y exigir a las empresas que explotaban las minas la clausura y la revegetación de las zonas donde vertían los estériles», comentó el presidente de la Plataforma, Juan Francisco Ortuño.

Éste pidió que la Comunidad Autónoma inicie ya las medidas anunciadas dentro del Plan de Recuperación Ambiental de Suelos Afectados por la Minería (Prasam). También recordó que el Gobierno regional actúa desde 2017 en Mazarrón.

Piden estaciones medidoras

Este miércoles, Ecologistas en Acción exigió a la Dirección General de Medio Ambiente de la Comunidad instalar dos estaciones móviles de la red de vigilancia atmosférica en Llano del Beal, Portmán, la Unión y otras zonas. Ve necesario «realizar mediciones del polvo contaminado por metales pesados en la Sierra Minera» de Cartagena y La Unión.

En un comunicado, Ecologistas recordó que lleva «años» pidiendo la inertización de balsas y suelos contaminados, así como denunciando la acumulación sin control de residuos mineros en el aire libre, expuestos la lluvia y el viento. Este material, aseguró la organización ecologista, está teniendo efectos perjudiciales sobre el medio ambiente, la salud pública y el paisaje».

En un comunicado, Ecologistas explicó que «las altas temperaturas aumentan la evaporación de la humedad del suelo y favorecen la migración de sales con metales pesados hasta la superficie». Eso, a su vez, provoca que en el aire se concentre un alto número de partículas de los suelos. Es un polvo fino contaminado que, «al respirarlo o en contacto con la piel, afecta a la salud humana, sobre todo a la de los niños, debido a su mayor exposición a estas formas de contaminación jugando».

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios